Un nuevo triplete del fútbol extremeño de bronce ante equipos andaluces deja a pacenses, dombenitenses y serones en una buena posición para lograr sus objetivos. El Don Benito dependía de sí mismo, pero ya también el Badajoz y el Villanovense. En el caso de los blanquinegros, ganando al filial almeriense, ya han alcanzado su cima particular de la cuarta plaza, una impresionante gesta desde la llegada del técnico franco-tunecino Mehdi Nafti en la que han subido diez puestos en la clasificación y tienen a tiro un histórico playoff de ascenso a Segunda División.

En la zona que ya no es baja sino media de la tabla, venciendo al San Fernando, el Don Benito se aleja del descenso en cinco puntos y cuatro de la promoción, y superando al filial malagueño, el Villanovense sale de la promoción de permanencia, dos por encima del descenso y uno de la promoción.

La alegría es total, pero siempre con los pies en el suelo. Quedan cuatro jornadas que serán muy complicadas. El Badajoz lleva seis victorias consecutivas y buscará la séptima el sábado a las 19.00 horas ante el penúltimo, el Atlético Malagueño. Bajo el lema ‘Que bote el Vivero’, el club vuelve a poner una promoción de entradas anticipadas al precio de 5 euros en fondo y preferencia en las oficinas del Nuevo Vivero y en varios puntos de la ciudad. Además, los abonados de tribuna podrán adquirir una entrada de su misma zona para un acompañante al precio de 10 euros.

La afición volverá a jugar un papel fundamental en los dos partidos de liga regular que le quedan al equipo blanquinegro en casa, con los filiales del Málaga y el Sevilla como rivales. Y fuera, dos salidas muy duras, ante el líder Melilla que se juega la primera plaza con el Recre y el Cartagena, los tres separados por un solo punto, y en casa del Atlético Sanluqueño que lucha por la permanencia, ubicado en el puesto de promoción.

Una hora antes que comience el partido del Badajoz, el Don Benito visitará al Marbella. El equipo de Juan García suma tres victorias y un empate en las cuatro últimas jornadas y su rival es octavo. A la semana siguiente, otro equipo de mitad de tabla, el Talavera, noveno clasificado, en el Vicente Sanz, el Linense, décimo, fuera y el Recreativo Granada, jugándose la permanencia, en casa.

Y a las 12 del domingo, el Villanovense recibirá al Melilla. El club quiere «volver a conseguir el mejor ambiente posible y llevar en volandas al equipo para ganar al líder en tan trascendental partido». Para ello, cada abonado podrá retirar en las oficinas de la entidad serona (martes, miércoles y viernes de 17 a 20 horas) dos entradas de preferencia por 5 euros y dos entradas de tribuna lateral izquierda por 10 euros. El calendario del equipo de Julio Cobos continuará con el Sevilla Atlético a domicilio, el Atlético Sanluqueño en casa y el Recreativo en Huelva.

Ilusión y cautela

Francis Ferrón, delantero del Badajoz, no quiere mirar más partidos del calendario que el del sábado. «Atlético Malagueño, es lo que hay, no hay otro y ya está. Si hemos llegado hasta aquí partido a partido, no hay que pensar en más. Será complicado. Aunque el rival está casi descendido, ellos van a querer gastar su última bala. Seguro que en el campo habrá buen ambiente y entre todos sacaremos el partido adelante. Tenemos que afrontar el partido como si el Malagueño fuera el Melilla y no nos vale otra cosa que no sea la victoria. También vale el 1-0 en el 93 y hay que estar tranquilos».

Álex Herrera, futbolista del Don Benito, expone que «Marbella es mi tercera casa, tengo grandes recuerdos y muy buenos amigos allí. Dependemos de nosotros. Cualquiera en navidades cuando nos fuimos a ocho o nueve puntos de la salvación firmaba esto, llegar a las cuatro últimas jornadas dependiendo de uno mismo. Cuando se depende de terceros mal vamos y tenemos el primer match-ball este sábado ante un equipo que lleva 15 semanas sin perder pero fuera de casa estamos haciendo muy buenos números. Iremos a Marbella sabiendo que lograr algo positivo sería dar un paso de gigante para el objetivo».

Julio Cobos, entrenador del Villanovense, destaca que «los chavales trabajaron muchísimo y sufrieron mucho en este tiempo. Ya merecíamos haber ganado algún partido fuera pero tenemos otra final contra el Melilla porque la distancia es poca, muy corta, y tendremos que seguir luchando».