El entrenador del Plasencia Galco, Dani García, se mostraba ayer feliz, al mismo tiempo que cauto, tras el sensacional triunfo cosechado en la noche del miércoles ante el líder León (89-70), que acababa con la mala racha de los extremeños en el inicio de la temporada.

Sobre el significado de la victoria en sí, dijo que "no deja de ser un triunfo más, aunque por la necesidad que teníamos de ello y por ser ante el equipo que, se magnifica un poco más el éxito, lógicamente".

"Con las ganas que salimos y nuestra concentración, superamos al León al inicio del partido y cogimos una distancia que administramos bastante bien durante el resto del encuentro", añadió el cántabro.

En relación con el debut del estadounidense Mark Poag, el técnico argumentó que "sabíamos lo que puede dar de sí y así se lo demostramos, con la responsabilidad que tenía que asumir, y él respondió a las expectativas como esperábamos de él, y a la vez un jugador de esta categoría hace que el rival esté también condicionado y le tenga en cuenta, ya que es la referencia exterior que nos hacía falta".

MEJOR EL RESTO Dani García incidió también en que la contribución del nuevo alero hizo mejores al resto del equipo. "Tenemos que disfrutar de esta victoria", dijo García, quien enfatizó en que este triunfo es uno menos que hay que conseguir para lograr el objetivo de la permanencia, que sigue siendo la indiscutible meta de los extremeños en la segunda categoría del baloncesto nacional.

El entrenador del conjunto jerteño manifestó también su satisfacción por el apoyo que llegó desde la grada, y que, en su opinión, contribuyó decisivamente en el éxito de la tercera victoria de lo que va de temporada para el Plasencia Galco.

Mientras tanto, el equipo descansó en la jornada de ayer para volver hoy al trabajo pensando en el próximo duelo, que será el domingo en Melilla ante el colista, que aún no se ha estrenado en cuanto a triunfos.

El equipo parte mañana sábado para entrenar por la tarde en el escenario del encuentro.