El atleta extremeño Alvaro Martín se mostró "muy decepcionado" por su vigesimosegundo puesto en los 20 kilómetros marcha y lamentó que falló en "el día D y la hora H". No se esperaba de él que estuviese en el podio, pero sí que podía luchar por el diploma olímpico, algo que hizo durante dos tercios de la carrera, estando en el grupo de cabeza. Después, se hundió irremediablemente.

"Estoy destrozado, decepcionado, ha sido una muy mala actuación, aunque tenga 22 años y pueda decir que soy joven, venía con una gran responsabilidad", dijo el llerenense Martín, medallista de bronce este año en el Mundial por equipos, tras cruzar la meta tercero.

Martín dijo que en la primera parte de la carrera fue bien, pero a partir del kilómetro 13 se descolgó de la cabeza y no supo reducir el ritmo para evitar ser adelantado por otros rivales.

EL RELOJ "Además, no he sabido competir bien, porque quedándome atrás no he sabido cambiar ritmo para no perder más posiciones y al final me he desfondado, muy mal", comentó. Aseguró además que al final de la carrera se quitó el reloj para no ver el ritmo que llevaba, pero aún así no logró acomodarse y vio que los rivales le seguían pasando por delante. De cara al futuro, dijo que el equipo español debe hacer una "lectura" de lo ocurrido en los Juegos Olímpicos, porque el año que viene hay un Campeonato del Mundo absoluto y en él, afirmó: "no podemos fallar".

LOPEZ, TAMBIEN MAL No fue el único español insatisfecho. El murciano Miguel Angel López, campeón mundial y que partía entre los favoritos, solo pudo ser undécimo en una competición en la que venció el chino Zhen Wang.

China hizo un histórico doblete en la prueba corta de marcha. Wang se colgó el oro con un tiempo de 1h19:14, seguido de Zelin Cai (1h19:26) y del australiano Dane Birth-Smith (1h19:37), que solo por cinco segundos privó del podio al brasileño Caio Bonfim (1h19:42, récord nacional).

López se recuperó algo en el último tramo de la prueba y acreditó una marca de 1h20:58, mientras Martín, que había estado más tiempo por delante, cayó al puesto 22 con 1h22:11.

El atletismo español, que no pisa un podio olímpico desde los Juegos de Atenas 2004 (plata de Paquillo Fernández, bronces de Joan Lino Martínez y Manuel Martínez), continúa fuera del cajón de honor.

López no se había escondido. "Voy a Río a luchar por la medalla de oro. No firmo ni la plata ni el bronce", había dicho. Confianza y seguridad no le faltaban, pero las fuerzas le abandonaron. Venía de hacer 38:06.28 en 10.000 metros (cuarta mejor marca mundial de la historia) sobre pista en los campeonatos de España de Gijón.

A la hora de la salida en la Barra de Tijuca (14.30 locales), junto al mar, la lluvia había cesado. El termómetro marcaba 23 grados, lucía el sol y la humedad alcanzaba el 63%, condiciones más benignas de lo previsto para los 74 contendientes. En el último cuarto de la prueba surgieron los chinos, con Wang a la cabeza, para imponer su fuerza. El nuevo campeón olímpico ha ganado seis de sus siete últimas competiciones.