El centrocampista brasileño Denilson de Oliveira, abandonó ayer la concentración de su equipo en Isla Canela, en Ayamonte (Huelva) para viajar a Sevilla y reunirse con el presidente de la entidad, Manuel Ruiz de Lopera.

El jugador, vestido con ropa de entrenamiento, eludió hacer declaraciones al término de la reunión, que se prolongó más de una hora en las oficinas del presidente, y su representante, Antonio Barrera, dijo a los periodistas: "Hemos venido para solucionar un tema que teníamos pendiente y no hay más problemas. El jugador regresa de nuevo a la concentración sin mayores problemas".

El internacional brasileño abandonó las dependencias de Ruiz de Lopera con rostro muy serio y regresó de inmediato a la localidad onubense.

El 17 de julio, Denilson fue expulsado de un entrenamiento por el técnico bético, Lorenzo Serra Ferrer, por una fuerte patada a Varela y posteriormente el mandatario bético manifestó que el jugador brasileño debía "ganarse el puesto" y que "vino como el fichaje más caro creyendo que tenía el puesto ganado sin pelear".