VILLARREAL: Reina, Javi Venta, Gonzalo Rodríguez, Alvarez, Arruabarrena, Riquelme (Font, m.75), Josico, Arzo (Cazorla, m.54), Sorín, Jose Mari y Forlán.

DEPORTIVO: Molina, Manuel Pablo, César (Pablo Amo, m.85), Andrade, Romero, Luque (Héctor, m.75), Munitis, Escaloni, Fran, Valerón y Tristán (Duscher, m.53).

GOLES: 0-1, m.32: Tristán. 0-2, m.60: Luque

ARBITRO: Iturralde González (Comité Vasco). Amonestó con cartulina amarilla a los locales Riquelme, Sorín y Quique Alvarez y a los visitantes César, Escaloni y Luque. Expulsó por doble amarilla al local Arruabarrena (m.71).

El Deportivo de la Coruña resurgió ayer en el estadio de El Madrigal y acabó con la condición de invicto en su propio feudo de un desconocido Villarreal al imponerse por 0-2 en un partido, muy igualado y vibrante en la primera parte, y que los gallegos dominaron a placer en la reanudación, en la que pudieron golear a su oponente.

El conjunto gallego llegó a El Madrigal con la intención de salir definitivamente de la crisis en la que estaba inmerso y refrendar su remontada tras el triunfo de la semana pasada.

POR LAS BANDAS Así, los de Javier Irureta, con dos estiletes en las bandas como Pedro Munitis y Albert Luque, se plantaron bien en la línea defensiva y buscaron siempre con peligro y velocidad la espalda de los defensas locales, que ayer no tuvieron una de sus actuaciones más acertadas.

Por su parte, el Villarreal salió con su mentalidad de tratar de mantener la pelota y buscar peligro con el juego del argentino Juan Román Riquelme en el debut de Juan Pablo Sorín, cuya licencia fue validada esta misma tarde, que tuvo una actuación muy prometedora en la primera parte, con profundidad e incluso con llegada.

El partido era un continuo alternar de oportunidad en un área y otra, sin llegar a un dominio claro de ninguno de los dos equipos, incluso hubo momentos en el que el partido estuvo muy abierto con ocasiones constantes.

Fue a partir de la media hora, cuando en cinco minutos sucedió de todo: el Depor perdonó, a Diego Forlán le anularon un gol y, finalmente, Diego Tristán acertó en su jugada para poner el 0-1 con el que acabó la primera parte.

SEGUNDA PARTE En la segunda parte, el Deportivo todavía lo tuvo más fácil. Los gallegos pudieron golear a un Villarreal que vio como Tristán perdonaba al primer minuto de la reanudación el 0-2 sólo ante Reina y al cuarto de hora, Luque acertara a marcar para sentenciar el partido definitivamente.

Este tanto, de bella factura al superar Luque de vaselina a Reina en su salida, mató a los locales que ya no tuvieron poder de reacción.

A partir de ese momento, el Deportivo de La Coruña dominó a placer la pelota ante un Villarreal que se vio impotente en todo momento para poder acortar diferencias y tratar de darle la vuelta al partido.

Los gallegos perdonaron una y otra vez lo que pudo ser una goleada mucho mayor y que no incrementaron por falta de acierto y se llevaron una merecida victoria con la que suman dos triunfos seguidos y confirman su renacer en el campeonato.