El Deportivo competirá esta temporada en la Liga Adelante después de llegar a un acuerdo con la Liga de Fútbol Profesional (LFP), el sindicato de futbolistas (AFE) y los jugadores de la primera plantilla de las temporadas 2011-2012 y 2012-2013 cuando apenas faltaban unos minutos para las doce de la noche del miércoles, momento en que expiraba el plazo. El descenso administrativo a Segunda División B habría supuesto, casi con total probabilidad, la liquidación de la entidad gallega, inviable en la tercera categoría del fútbol nacional.

"Podemos anunciar que la LFP, el Real Club Deportivo de A Coruña, AFE y los futbolistas han alcanzado una solución satisfactoria para los intereses del deportivismo", afirma el comunicado colgado en la web de la entidad. La nota no entra en detalles sobre las cantidades adeudadas a los jugadores, pero deja entrever que las deudas del club con la Administración serán saldadas de manera parcial en los próximos meses, según refleja un convenio que aún no ha sido firmado.

"Ante la crítica situación en la que se encuentra el Deportivo y ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo entre el club, la administración concursal y los acreedeores de la sociedad debido a las posturas mantenidas por las partes, nos hemos visto obligados a dar una solución a las cantidades adeudadas calificadas como concursales", añade el texto. Justifica además que no se trata de una condonación, sino que los pagos se realizarán de dicha forma "debido al imposible acometimiento de las mismas y de la total falta de ofrecimiento de garantías por parte del resto de intervinientes en la mesa negociadora".

"En este momento únicamente queda pendiente de abono las cantidades generadas contra la masa y de las que se debe hacer cumplido pago antes de la medianoche del 31 de julio del 2013. Esperamos y deseamos que el resto de miembros de la mesa negociadora actúen con la misma diligencia y responsabilidad con la que han actuado los suscribientes. La sensibilidad de la gente del mundo del fútbol ha hecho posible alcanzar esta solución", añade la nota.

El acuerdo podría incluir una fecha de caducidad al mandato de Augusto César Lendoiro, extremo que el presidente deportivista niega. "Los miembros del Consejo de Administración no somos ningún rival para el deportivismo, pero tampoco admitimos que se nos eche del lugar en el que llevamos 25 años. Somos responsables de una deuda y de los éxitos, pero no vamos a permitir que nadie piense que podemos firmar nuestra sentencia de muerte", declaró al abandonar el edificio donde se celebró la reunión, que duró siete horas. "Es un chute de adrenalina. Sobrevivimos", comentó por su parte Fernando Vázquez, el entrenador, tras estar pendiente de cómo avanzaban las negociaciones entre las partes implicadas.