CELTA: Cavallero, Velasco, Cáceres, Berizzo, Juanfran, José Ignacio, Giovanella, Angel, Mostovoi (Vagner m.82), Jesuli (G. López m.72) y Edu (Catanha m.87).

DEPORTIVO: Molina, Scaloni, Donato, Naybet, Romero, Duscher (Sergio m.60), Mauro Silva, Víctor, Valerón, Fran (Luque m.62) y Makaay.

GOLES: 1-0 (m.57) Jesuli; 2-0 (m.62) Edu; 3-0 (m.78) Edu.

ARBITRO: López Nieto (Comité Andaluz). Mostró tarjeta amarilla a Scaloni, Duscher, Berizzo, Víctor y al técnico visitante Javier Irureta.

INCIDENCIAS: Partido de la trigesimoquinta jornada de Primera División.

El Deportivo sufrió un merecido castigo por la incomprensible desidia con la que encaró un partido que, además de suponer un duelo gallego, significaba su continuidad como candidato al titulo de Liga en caso de obtener la victoria.

Tras una pésima primera parte, la reanudación no auguraba nada mucho mejor para el sufrido público pero el Celta tuvo la suficiente dosis de fuerza, inyectada por la voluntad de Juanfran en sus internadas por la banda.

Pese a todo, el camino del Celta no estuvo claro hasta que Juanfran culminó una de sus voluntariosas cabalgadas con un centro que el sevillano Jesuli cazó un pleno vuelo con un cabezazo inapelable para Molina.

El que esperara por ello una fulgurante reacción del Deportivo se quedó con las ganas porque apenas se notó un poco más de presión, que no de ideas, de un equipo con el partido perdido de antemano en el aspecto psicológico. El gol fue un golpe moral positivo de gran importancia para los vigueses y entonces surgió la figura de Edu, irregular en su trabajo hasta ese momento. Una nueva falta sobre Juanfran propició un centro medido de Mostovoi que Edu cabeceó de forma contundente desde cerca.

El Celta tenía el partido en el bolsillo con un triunfo mucho más cómodo de lo esperado, porque al Deportivo no le funcionó nada y el flojo rendimiento de hombres como Valerón o Makaay, que fallaría el penalti de la honrilla con el tiempo cumplido, les convirtió en un equipo mediocre. Al final, los célticos pudieron vivir una fiesta de fútbol con el tercer gol en un error de Molina aprovechado por Edu.