El presidente de la UEFA, Michel Platini, tuvo que ser hospitalizado anoche en Johannesburgo tras sufrir un desmayo mientras cenaba en un restaurante. "Ha sido hospitalizado por precaución", se apresuró a explicar una fuente de la FIFA para desmentir los rumores que apuntaban a un infarto. Tras las primeras pruebas, ya con Platini consciente, los médicos descartaron que se tratara de algo grave. El dirigente, de 55 años y que arrastraba un resfriado, debía pasar toda la noche en observación. Si el domingo está en el palco para ver la final lo hará, además de con la reina doña Sofía, que ayer visitó un centro de educación en un barrio marginal.