Día especial para la plantilla del Mideba Extremadura. El equipo de baloncesto en silla de ruedas que se desplazó al Colegio Luis Chamizo, en Zahínos, donde realiza sus estudios Alejandro Reina Barragán. Se trata de un niño de nueve años al que una enfermedad le obliga a utilizar silla desde los cuatro y que se ha convertido en alguien muy especial para el club pacense. Tras visitarlo el año pasado cuando disputaba la Eurocopa Andre Vergauwen, es ya todo un incondicional del equipo.

Tras aquella experiencia, se desplaza una vez a la semana desde su localidad de residencia hasta Badajoz para seguir las indicaciones de David Jurado, segundo entrenador del Mideba, que es su nuevo profesor deportivo o más bien su profesor particular de baloncesto en silla de ruedas, enseñándole las técnicas de este deporte.

El acto en Zahínos fue presentado por la directora del colegio, Manuela Costillo, quien hizo una introducción, y el secretario general del Mideba, Javier Pérez, presentado a los componentes de la plantilla y comentando detalles sobre el deporte que practican.

Seguidamente los jugadores realizaron distintos ejercicios habituales en los entrenamientos, así como un pequeño partidillo , que finalizó con la inclusión de Alejandro en uno de los equipos. Fue muy vitoreado por sus compañeros cuando cogía la pelota. Luego recibió un balón firmado por la plantilla.

Para finalizar el evento se invitó a los niños subirse a la silla de ruedas para practicar baloncesto. Este acto se enmarca dentro de las actividades previstas por el Mideba Extremadura bajo el lema "Fuerza, Coraje, Valentía", para dar a conocer este deporte entre los niños, fomentando el espíritu de superación y los valores del deporte, y como muestra de ánimo a Alejandro en particular.

Por parte del Mideba Extremadura, "se agradece el empeño e interés mostrado por la Consejería de los Jóvenes y el Deporte, quien ha posibilitado el acto gracias a su colaboración sufragando los gastos del traslado a Zahínos y regreso, sin el cual no podría haberse realizado debido al precario estado de nuestra economía".

Como es fácil de imaginar, Alejandro exhibió una sonrisa de oreja a oreja durante todo el tiempo que duró la experiencia, una auténtica sorpresa. No todos los días tus ídolos vienen a verte al colegio.