«Fastidiado» estaba el técnico del Mérida, Diego Merino, después de que su equipo no pudiera pasar del empate frente al Recreativo Granada, porque «todo lo que no sea sumar de tres en tres, no nos vale». Para Merino «no hemos sabido interpretar lo que requería la primera parte, pero en la segunda nos hemos vaciado, hemos empatado y hemos tenido opciones para hacer alguno mas». El técnico romano sabe que la situación de su equipo supone que «cada partido es una final» y con respecto a la reacción del público, «lo entiendo», afirma el preparador.

Por su parte David Tenorio, técnico del filial nazarí, entiende que «ha habido dos partidos muy distintos antes y después de la expulsión. Antes hemos tenido suficientes acercamientos al área como para sentenciar, pero no hemos estado efectivos. Después de la expulsión era aguantar el empuje del Mérida». Ante esta tesitura, Tenorio da el punto como «positivo, por estar tantos minutos con uno menos».