El Diocesano ya se gusta. Ayer liquidó al Valdivia (3-0) en un buen partido de los locales en los campos Manuel Sánchez de Cáceres. El test resultó positivo, y no solamente por el marcador, sino por las sensaciones que se desprendieron sobre el césped.
Superadas las dudas por la marcha de numerosos jugadores de años anteriores y también por el cambio de técnico, Adolfo Senso ya hace funcionar al cuadro colegial. Especialmente en el primer tiempo, los rojillos exhibieron momentos de talento y buen juego y evidenciaron que, en lo físico, están varios pasos por encima del nivel de, por ejemplo, su rival de ayer. Y es que el Valdivia de Ricardo Tapia apenas creó peligro ante la meta rival.
Los tres fichajes, el central brasileño Davi, el centrocampista Dani Sales y el extremo Álvaro Quintino, mostraron siempre muy buenas maneras en este choque y se amoldaron de manera óptima a los esquemas del ‘nuevo’ Dioce, en el que ‘Fito’ Senso dispuso un 4-4-2 claro.
En el primer tiempo anotaron sus tantos Javi Bernal y Juanlu y en el segundo redondeó la cuenta Mancha dentro de un tono individual en el que destacó especialmente Jaime, siempre muy participativo e incisivo.
Por parte de los valvienses aún se espera que esta semana sea para mejorar en lo físico para una liga en la que ha de mejorar considerablemente, al menos sobre lo visto ayer en los campos de la barriada de Pinilla. Tiene mucho trabajo en este sentido Ricardo Tapia, aunque está claro que ha conseguido un bloque en el que hay buenas individualidades, que sin embargo ayer no brillaron en Cáceres.
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