Importante victoria la que consiguió el Diocesano en la tarde de ayer. Los locales superaron por 2-1 al Getafe, tercer clasificado, en un partido en el que fueron por detrás hasta el descanso pero en el que salieron muy motivados en la reanudación. En la segunda mitad del encuentro el Diocesano desarrolló un juego coral que les permitió obterner tres puntos muy importantes en su carrera para la permanencia en el grupo quinto de la división de honor juvenil. Mientras, La Cruz Villanovense disputará este mediodía a partir de las 12.00 en casa, su enfrentamiento ante el Atlético Cazarrubuelos.

El Diocesano dispuso de buenas ocasiones en los primeros compases del encuentro para haberse adelantado en el marcador. Pero la falta de puntería marcó el guión de esos primeros minutos del duelo. En el minuto 10, en un mano a mano contra el portero azulón no se resolvió de la mejor manera, ya que el balón se marchó por la línea de fono y se fue a saque de esquina, tras una buena intervención del meta de los de Getafe.

Tan solo cinco minutos después, la tortilla daría la vuelta, y es que Maikel tuvo en sus botas, para el Getafe, una gran oportunidad que desbarató el guardameta Mario. En el minuto 17, un derribo sobre Viñuela en la frontal del área, fue botado por Javi González, pero su lanzamiento fue detenido por el portero.

Superada ya la primera media hora de juego, se adelantaría el Getafe con una rápida salida por banda, el balón fue centrado y el rechace de Mario cayó en las botas de Bourgal y este no desaprovechó la ocasión para mandar el balón al fondo de la red. Con la ventaja visitante en el marcador se acabó la primera mitad y ambos se fueron a los vestuarios.

Tras el tiempo de asueto, las cosas empezaron a cambiar a favor del Diocesano. Los cacereños salieron a encarar la segund aaprte con un plus de motivación. El tanto del empate llegó pasada la media hora en el minuto 67, tras una buena jugada por banda de Javi Moya, que asistió a Viñuela que logró batir, esta vez sí, al portero. Con esa inercia positiva de los cacereños, Sergio, de cabeza, le daría la vuelta al partido haciendo el 2-1 en el minuto 73.

El Diocesano no se conformaba con el ir por delante por la mínima y lo seguiría intentando. Otra buena jugada, esta vez por banda izquierda, fue remtada con un gran testarazo de Sergio que detuvo el portero getafense. El Getafe lo intentaba por las bandas, era la manera más fácil que encontraron los azulones para tratar de poner a Mario en aprietos, pero los centros no lograban encontrar rematador, para descanso de la zaga cacereña.

A poco para el final, Viñuela se plantó solo ante el portero pero esta vez no acertó a marcar el gol que hubiera supuesto la sentencia. En los últimos minutos, el Dioce, jugó con la ventaja a favor de la que disfrutaba, buscando posesiones largas para aguantar el balón y dejar que el tiempo se agotara. Al final, gran alegría de los cacereños.