DITER ZAFRA: Raúl; Checho (Dieguito, M. 68), Nuno, Dani Mayo, Juan Manuel; Macías (José Luis, M. 63), Juanma, Martín Tártara; Ciani, Alex e Israel (Carlos, M. 63).

CARTAGONOVA: Pablo Ancos; Requena, Ico, Zamora (Quinín, M. 58), Federico (Verón, M. 46); Javi Delgado, Berruezo (Morillas, M. 69), Sanromán, Gorka Soria; Díaz y Huegún.

ARBITRO: José Ramón Jiménez Alberte (Comité Gallego). Bien (2). Amonestó a los locales Juan Manuel, Nuno, Juanma, Martín Tártara y Ciani. Por el Cartagonova vieron tarjetas Requena y Zamora.

INCIDENCIAS: Partido de puertas abiertas y minuto de silencio por Saito.

Tercer empate consecutivo del Díter Zafra, que sumando los puntos uno a uno no acaba de asegurarse la permanencia. Parece que el destino le tiene reservado un final con suspense al cuadro zafrense, haciendo bueno el precedente del año anterior. Ayer empató sin goles ante el Cartagonova en un partido donde la iniciativa fue local, aunque faltó puntería en los últimos metros a los de Angel Marcos. Y eso que el entrenador azulino arriesgó con los cambios que introdujo en la segunda parte; a pesar de ello, su equipo no consiguió perforar la meta de Pablo Ancos. Es más, el Díter llegó a desaprovechar hasta un penalti en el minuto 16, tras un claro agarrón de Zamora a Macías. Alex no fue capaz de batir la portería del equipo de la Ciudad Departamental.

El cuadro murciano se tomó el encuentro con mayor tranquilidad, sabiendo que el empate no era mal marcador para sus ya mermadas aspiraciones en el presente campeonato liguero. No creó demasiados problemas al portero Raúl en todo el duelo.

MARTIN TARTARA LO INTENTA

Antes del descanso (m. 37), el Díter pudo adelantarse con una volea de Martín Tartara desde más de 30 metros, pero el meta visitante, en una gran intervención, sacó el balón de la mismísima escuadra.

Durante el segundo periodo bajó sensiblemente el ritmo del encuentro y el Díter buscó el portal contrario con demasiada precipitación. En esta fase no se elaboraban jugadas en la zona ancha como se había hecho durante la primera mitad. Además, la defensa blanquinegra, demasiado adelantada, controló siempre la situación sin demasiados apuros.

Los delanteros de ambos equipos continuaron sin puntería y condenaron irremisiblemente el partido al empate sin goles con el que hubo que conformarse.