Son dos competidores natos, de esos que no abandonan hasta que no les queda la más mínima posibilidad de triunfo. Y hoy tendrán la posibilidad de demostrarlo una vez más en un escenario internacional: los XVII Juegos del Mediterráneo, que se disputan en Mersin (Turquía). Son la atleta zoriteña Teresa Urbina y el karateca de Higuera la Real Manuel Rasero, a los que les llega el turno de competir en sus respectivas disciplinas, soñando incluso con obtener medalla.

Por ellos no va a quedar. Urbina, después de superar algunos problemas físicos, está completando una de sus mejores temporadas. Ya debutó como internacional en el Europeo en pista cubierta y ahora llega a estos Mediterráneos en su prueba favorita al aire libre, los 3.000 metros obstáculos.

El momento decisivo

La carrera está prevista para las 18.30 hora española y la estilizada atleta extremeña parte con una de las mejores marcas de las participantes. Sus primeras sensaciones son positivas, aunque ha lamentado el fuerte calor y la humedad que reinan en Mersin.

Por su parte, Manuel Rasero también está ante una gran oportunidad. Instalado en la élite nacional, al no ser el kárate un deporte olímpico no aspira a esa gloria cada cuatro años, por lo que los Juegos del Mediterráneo son un pequeño consuelo. Está inscrito en la categoría de kumite (lucha) de menos de 67 kilos.

Desde bien temprano afrontará todas las eliminatorias, jugándose a cara o cruz constantemente el acceso al podio. Según su entorno, se encuentra en un notable estado de forma.

Ambos tienen una inspiración en la que fijarse: el arquero cacereño Antonio Fernández consiguió dos medallas al principio de estos Juegos, primero una plata por equipos y, el pasado lunes, el oro individual. Nadie pudo con él.

España está completando un buen evento. A última hora de ayer figuraba quinto en el medallero con 16 oros, 27 platas y 23 bronces, superado por Italia, Turquía, Francia y Egipto.