Cacereño 4: Josete, Palero, Borja, Guerrero, Roberto, Rocha (min. 80, Tomás), Estévez, Lolo (min. 65, Chumi), Valtierra (min. 72, Toni), Rai y Sergio.

Imperio de Mérida 0: Julio, Fabio, Raúl Morales, Pedro José (min. 7, Toledo), Carlos, Francis, Candela, Edu, Escalise (min. 71, Aranda), Javi Ramos (min. 64, Nico) y Lauri.

Goles: 1-0: min. 52, Rai. 2-0: min. 53, Valtierra. 3-0: min. 60, Lolo. 4-0: min. 84, Toni.

Arbitro: Núñez Cuello (1). Enseñó cartulinas amarillas al local Lolo y a los visitantes Fabio, Raúl Morales y Edu.

Incidencias: Partido de la última jornada de la primera vuelta de Tercera División. Unos 1.000 espectadores acudieron ayer al estadio Príncipe Felipe de Cáceres. Tarde despejada, pero con temperaturas muy bajas y terreno de juego en buen estado.

Dos caras bien distintas presentó ayer el Cacereño en su enfrentamiento ante el Imperio de Mérida. El equipo de Angel Alcázar fue capaz de alternar en el mismo encuentro su juego más insípido con una solvente y sobria capacidad goleadora. La primera parte resultó verdaderamente gélida para los locales, con una sola ocasión destacada y un rival que no sólo plantó cara sino que también pudo haberse adelantado en el marcador. En cambio, los segundos 45 minutos mostraron a un Cacereño desenvuelto y cargado de motivación. Cuatro goles acertaron a conseguir los verdes y pudieron caer algunos más. Con todo ello, el 4-0 con el que concluyó el choque se fraguó íntegramente tras el descanso. El Imperio, por su parte, concatena dos goleadas en contra ante los dos primeros de la clasificación en el arranque del 2009. Ocho goles en contra por tan solo uno a favor dejan cierto regusto amargo, ya no solo por no ser capaz de sumar ni un punto ante Cerro y Cacereño, sino por ser barridos en dos partidos en los que en ninguno de ellos mereció tan severo castigo.

A los de Alcázar les queda el sinsabor de no haberse coronado campeón de invierno, pese a haber estado en la cima de la clasificación hasta el pasado fin de semana. Rocha, tras el partido, restaba importancia a esta circunstancia y señalaba que lo que verdaderamente importa es ser primero al final de la segunda vuelta y no ahora.

El choque frente al Imperio dejó además el estreno en las filas verdes de Roberto Rodríguez. El jugador asumió los galones de titular ante las ausencias de Jurado y Tito. El debutante globalmente dejó buenas sensaciones, aunque Alcázar dijo que rindió a un sesenta por ciento del nivel puede llegar a ofrecer.

CAMBIO TEMPRANERO El histórico Pedro José sólo pudo mantenerse sobre el terreno de juego siete minutos. El jugador hizo un esfuerzo por ayudar a sus compañeros, pero tuvo que retirarse porque sus dolencias lejos de ahuyentarse se multiplicaron.

Los minutos transcurrían y el partido estaba frío. Los de Francisco Palomino entendían que si renunciaban a jugar al fútbol "nos iban a caer cuatro". "Aunque al final, sí que nos cayeron cuatro...", ironizaba el técnico emeritense.

En el 35 los locales crearon la primera oportunidad de peligro. Rocha, en primer lugar, y luego Roberto, con un cabezazo al palo, reivindicaban a los verdes.

El Imperio dispuso de numerosos acercamientos, aunque todos ellos bajo el mismo patrón: faltas laterales colgadas sobre el área que a punto estuvieron de mover el marcador.

Pero si en el primer tiempo el Cacereño tardó 35 minutos en dar señales de vida, en el segundo tardó también 35... pero 35 segundos para que Sergio jalease a los suyos. La actitud cambió radicalmente. Rai y Valtierra en dos minutos --52 y 53-- mataron el partido. Lolo y Toni también vieron puerta y el partido pudo acabar en una mayor goleada.