El portugués Luis Figo y Michel Salgado son serias dudas para el partido que el Real Madrid disputará mañana en Montjuic, contra el Espanyol, mientras que el francés Zinedine Zidane, con una luxación en el hombro derecho, es baja para las tres próximas semanas. Son las principales secuelas físicas de un encuentro, el del miércoles ante el Bayer Leverkusen (3-0), que sobre todo ha dejado huellas mentales en el madridismo, que no ha digerido bien la humillación, hasta el punto de estar especialmente dolorido en su estado de ánimo. Ayer, las críticas fueron especialmente duras hacia los jugadores en el entrenamiento, en el que se escucharon gritos de desaprobación. También la prensa mundial se cebaba ayer con la imagen dada por el club blanco, cuyo técnico, José Antonio Camacho, es uno de los principales referentes en cuanto a la propia crítica de periodismo.

El estreno europeo en Leverkusen está costando caro al Real Madrid. A la goleada encajada hay que sumar las lesiones que deja un partido que representa el peor inicio madridista en Liga de Campeones.

Según el parte médico redactado ayer por los doctores del Real Madrid, el portugués Luis Figo sufre un fuerte golpe que le ha producido un hematoma en el pie derecho. Ayer, se ejercitó de forma suave y está bajo tratamiento médico, pendiente de la evolución que protagonice en las próximas 24 horas.

Lo mismo ocurre con el lateral gallego Michel Salgado, con una contusión en la rodilla derecha, que le impidió salir a correr junto al resto de titulares del partido del pasado miércoles en Leverkusen, y se puso en manos de los doctores madridistas.

ZIDANE, EN REPOSO Mientras, los galenos del Madrid informaron de que Zidane guarda reposo en casa por el dolor que sufre en el hombro derecho y la hinchazón que presenta la zona dañada tras el golpe recibido por el brasileño Roque Junior.

La noticia positiva en el Real Madrid la protagoniza el central inglés Jonathan Woodgate, a quien los doctores le realizaron una resonancia magnética, que confirma la recuperación total de la rotura fibrilar en el recto anterior del muslo izquierdo.

La particular pretemporada que está realizando Woodgate junto al recuperador José Luis Sanmartín, aumenta la carga de trabajo a cada día que pasa y la incorporación al resto del grupo está cercana. Es la única noticia positiva de un Madrid que está en sus peores momentos.