CACERES PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD - 78: Marco (13), Garfield Blair (15), Juanma Ruiz (5), Kelsey Williams (14), Javier Carter (17) --cinco inicial-- José Medina (0), Miguel Conejero (0), Luis Parejo (8), Kasse (6).

GRUPO EULEN CARREFOUR EL BULEVAR AVILA - 76: Guillermo Justo (13), Juan Francisco Herrero (9), Carles Marzo (8), Adrián Méndez (13), Fernando Fernández (6) --cinco inicial-- Bethencourt (0), Meter Simek (10), Arturo Fernández (7), Adrián Camino (3), Duty (7).

MARCADOR POR CUARTOS: 20-13, 37-32, 56-57 y 78-76.

ARBITROS: Caballero y González.

Firmó el Cáceres un 'dos de dos' insatisfactorio. Ganar siempre es bueno, claro, pero las sensaciones a nivel colectivo del grupo de Ñete Bohigas no fueron positivas frente a un voluntarioso pero limitado Grupo Eulen Carrefour El Bulevar Avila (interminable, eh). 78-76 fue el resultado final de un choque resuelto en una moneda al aire que nunca debió lanzarse. Los extremeños son muy superiores en todos los aspectos, menos en uno importante: el de jugar como equipo.

La mañana dominical estaba llena de incógnitas y terminó de despejarlas todas. Sí se confirmó que va a costar mucho llevar al aficionado al Multiusos. Desde el club se lanzan mensajes optimistas, de ilusión, pero el palo de descender de categoría por motivos económicos ha hecho que al menos la mitad del público habitual de la pasada campaña haya desertado. Alrededor de medio millar de fieles acudieron, aunque, eso sí, con muchas ganas de animar.

Las victorias pueden ser el gran aval de este equipo. De momento, el juego, no. El choque recordó peligrosamente al amistoso de pretemporada en el que cacereños y abulenses estuvieron igualados durante gran parte de los 40 minutos y todo se resolvió en la última acción. Esta vez salió cara para un Cáceres basado en sus interesantísimas individualidades, pero también lastrado por errores absurdos. Hay que descifrar la brújula aun.

El Avila (acortémoslo así) 'hizo la goma' en plan ciclista. Cada vez que los locales castigaban el juego interior o encontraban una buena racha de Garfield Blair parecía que podían escaparse definitivamente. Pero no lo terminaron de conseguir. Como los equipos pequeños, el conjunto de David Mangas se aferró la lotería de los triples, lo que le sirvió para llegar con muchas opciones al tramo final. Y eso que perdió por lesión a uno de sus referentes, Guillermo Justo, en el segundo cuarto.

A TIRONES Tras un comienzo bastante frío, el Cáceres encadenó varias acciones espectaculares para marcharse al final del primer cuarto con un 20-16 favorable. Ya entonces se apreciaban notables despistes defensivos y una cansina predilección por perder compulsivamente la bola en situaciones absurdas.

Del 30-23 (min. 16) al 32-32 apenas tres minutos después. Todo seguía muy abierto al descanso (37-32). La abrumadora superioridad en el rebote del equipo de Bohigas no se expresaba en el marcador. Luis Parejo debutaba en liga y, aunque luego dijo que su problema en un pie no le afectó, tuvo un partido bastante gris.

Durante el tercer cuarto lo de jugar con fuego siguió siendo una peligrosa costumbre. El Avila se puso por delante (47-52, min. 28), pero José Antonio Marco apareció con cinco puntos seguidos para dar paso al 56-57 faltando solo un cuarto.

Un nuevo acelerón no tuvo rentabilidad. El camino parecía allanado a falta de 3.20 (73-68), pero la constancia no es de momento 'marca de la casa' en este equipo, que se vio muy apurado con un triple de Juan Francisco Herrero que ponía el 75-76 faltando 33 segundos.

Llegó entonces el momento culminante. Kelsey Williams sacó una falta, anotando solo el primer tiro libre. El rebote ofensivo lo capturó Javier Carter, que, tras otra personal recibida, sí anotó los dos. Faltaban apenas 20 segundos y había que defender el 78-76. Carter estuvo listo en el cambio defensivo y obstaculizó bien el último lanzamiento abulense para refrendar el 'dos de dos'. Espera el Marín Peixe Galego el próximo sábado en Galicia.