España, tras la inscripción del Ayre como desafío para la 33 Copa del América, contará por primera vez en su historia con dos sindicatos, ya que el Desafío Español fue el primero en inscribirse y afronta esta nueva cita como 'Challenger of record' -primer desafiante-. Después de meses de dudas sobre si un nuevo equipo español pudiera dar el paso, el sindicato que encabeza el regatista mallorquín Pedro Perelló ha sido aceptado por la Sociedad Náutica de Ginebra (SNG), a la que representa el suizo Alinghi, como participante de la próxima edición.

"Ayre dejará de ser humo para ser una realidad", vaticinaba ya hace algunas semanas el propio Perelló para defenderse ante los incrédulos y hoy se ha confirmado. El segundo sindicato español en la Copa del América, además, tendrá lazos con la Comunidad Valenciana porque, pese a especularse que podría desafiar por el Club Náutico de Palma de Mallorca, finalmente serán los representantes en la competición del Club Náutico de Denia.

Han sido meses de trabajo y dar pequeños pasos, que se han visto frenados por el conflicto jurídico que envuelve a la 33 edición debido a la demanda del Golden Gate Yatch Club, al que representa el BMW-Oracle, contra la Sociedad Náutica de Ginebra (SNG) y Alinghi, por considerar inválido al Desafío Español como 'Challenger of récord', y por tanto el Protocolo firmado entre estos dos últimos.

Ayre apuntaba alto cuando confirmaba que quería al argentino Juan Kouyoumdjiam como diseñador, o al veterano regatista estadounidense Paul Cayard como patrón, aunque finalmente han recalado en el Team Origin británico y el Desafío Español, respectivamente. Al final, poco se sabe de la tripulación de Ayre, lo único es que el director deportivo y máximo responsable en la configuración del equipo será el regatista argentino Guillermo Parada.

Además, Perelló no ocultó su acuerdo con el Luna Rossa para comprar su material y su deseo de quedarse instalado en su base, algo que tampoco ha podido conseguir porque ACM, la empresa organizadora, había acordado cedérsela al equipo británico.

Sin embargo, el Ayre constituye un proyecto fiable, según sus creadores, que tiene un presupuesto cercano a los cien millones de euros pero que todavía no ha hecho oficial a sus patrocinadores. Ayre tendrá que luchar por granjearse el cariño y el apoyo de los españoles, en general, y de los valencianos, en particular, y tendrá que luchar con el Desafío Español por compartir protagonismo televisivo y ser también el otro 'equipo de casa'.

La presencia española en la Copa del América se inició en 1992, con el España'92-V Centenario y tras sendas participaciones en 1995 (Rioja de España) y 2000 (Bravo España), llegó a su máximo esplendor con la participación del Desafío Español, encabezado por Agustín Zulueta. En su cuarta presencia en la competición de vela más antigua del mundo, el equipo español consiguió un proyecto fiable y consistente, que logró la hazaña de alcanzar las semifinales de la Copa Louis Vuitton, lo que hizo crecer su prestigio ante las siguientes ediciones y puso las exigencias muy altas.

Así, el propio Desafío Español y el Ayre parten con el listón alto para una cita, prevista inicialmente para Valencia en 2009, que se ha visto empañada por los problemas jurídicos entre Alinghi y BMW-Oracle y que todavía tiene frenada la competición, a la espera de conocer con certeza su fecha de celebración. Con Ayre, ya soy siete los equipos inscritos en la 33 edición -además del defensor Alinghi-, aunque sólo los españoles tienen dos representantes. Junto a los tres citados, están inscritos el Team Origin británico, el Shosholoza surafricano, el United Internet alemán y el Team New Zealand neozelandés.

No será la primera vez que haya más de un representante del mismo país, ya que de hecho, en la pasada edición hubo tres equipos italianos aunque los más prolíficos en este sentido han sido los americanos, que en la edición de 2000 participaron con cinco barcos y en la de 2003, con tres.