Finalmente, Bernie Ecclestone, el jefe de la fórmula 1, será juzgado en Alemania. El empresario británico está acusado de sobornar con cerca de 44 millones de dólares (35 millones de euros) a Gerhard Gribwoksky, su antiguo socio y expresidente del banco alemán Bayern LB, en el marco de la venta de los derechos de la F-1 al fondo de inversiones británico CVC.

En junio del 2012, Gribkowsky reconoció ante los tribunales haber recibido ilegalmente tal cantidad entre el 2006 y el 2007. El banquero fue condenado a ocho años y medio de presión por cohecho, desfalco y fraude fiscal. Por su parte, Ecclestone, que acudió al juicio en calidad de testigo, siempre clamó su inocencia.

La Fiscalía alemana llevaba desde el 2011 investigando al jefe de la F-1, de 82 años. A mediados de mayo anunció el cierre de las investigaciones, sin especificar si presentaría una demanda, que finalmente ha cursado.