El Pamesa Valencia se enfrentará a partir del próximo jueves al Barcelona en la final de la Liga ACB, una cita en la que el conjunto valenciano tendrá que frenar al temible efecto Dejan Bodiroga .
En los últimos tiempos su carrera ha acumulado éxito tras éxito. El pasado mes de septiembre, con Yugoslavia, se proclamó campeón del mundo en Indianápolis y fue el mejor jugador. En febrero y en mayo se repitió el guión, el Barcelona ganó la Copa del Rey y la Euroliga con el seromontenegrino como jugador más valioso.
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Paco Olmos, preguntado por si se pueden tomar como referencia para esta final los dos encuentros que ambos equipos han disputado esta temporada y que acabaron con triunfo de su equipo, el técnico lo descartó por completo y Bodiroga fue el centro de su argumentación.
"No se pueden tomar como referencia porque Bodiroga recibió en el primero la mejor defensa de la liga de manos de Alessandro Abbio, que ahora no está con nosotros, y en el segundo no estuvo", dijo.
Sus temores son fundados. Bodiroga, además de sus brillantes actuaciones en los encuentros más destacados, acumula 37 encuentros en la Liga ACB con un promedio de 16 puntos y 4 rebotes por partido, con una valoración media de 18 puntos. Sin embargo, se confía en pararle.
