Para aquellos que aún discuten la importancia de que un extremeño, José Manuel Calderón, esté jugando en la NBA, los primeros partidos han terminado por confirmar que el de Villanueva de la Serena no va, ni mucho menos, de comparsa. Sus números y poder de liderazgo están a punto de hacerle titular en el, eso sí, débil equipo de Toronto. Calderón, amparado en su enorme talento, está sobresaliendo mucho más de lo que las previsiones más optimistas auguraban. A falta de buenos clubs y pasando por encima de los derbis futboleros, el ´efecto Calderón´ debe llenarnos de orgullo y compensar vacíos. También debemos celebrar que balonmanistas como Prieto, Juancho o Pocholo sean importantes en sus equipos, al igual que los futbolistas Enrique, Ito o César, por poner más ejemplos. Pero sin duda la aventura americana del jugador de baloncesto está muy por encima de cualquier logro individual conseguido por un paisano. Por ello lo mejor es difrutar al máximo.