El entrenador del Mérida señalaba que "es el día más triste desde que soy entrenador del Mérida y si pudiera iba uno a uno a los aficionados que han venido hoy a pedirles perdón". Entonaba el ´mea culpa´ porque "hemos estado fatal, el primero yo, me hubiera encantado poder cambiar a nueve en el descanso y que alguien me sustituyera a mí". El entrenador tampoco "veía ningún motivo por el que hemos cambiado tanto de la semana pasada a ésta".