Con turrones y polvorones acabando de digerirse, la plantilla del Cáceres Patrimonio de la Humanidad volvió en la tarde de ayer al trabajo con la mirada fija en Coruña, donde el domingo juega con el objetivo de poner fin a su mala racha. Tres derrotas seguidas por la mínima (-1 ante Palencia y Valladolid y -2 ante Alicante) han dejado una sensación «agridulce», reconoce el capitán Luis Parejo. Dulce porque está compitiendo hasta el final, incluso ante los rivales que aspiran al ascenso. Agria porque al final «la moneda está saliendo cruz».
Pero si algo tiene seguro el capitán verdinegro es que lo sucedido en esos tres últimos partidos no tiene que desanimarles, sino ser un acicate para los próximos encuentros. «Tenemos que estar muy satisfechos porque el trabajo está siendo muy bueno. Quedan tres partidos para acabar la primera vuelta y la dinámica del equipo está siendo muy buena», añade Parejo, que se aventura a hacer un pronóstico cuando se le pide un balance de las sietes victorias y siete derrotas que lleva hasta ahora el equipo: «Vamos a sacar balance positivo».
El Cáceres visita este domingo al Leyma Coruña en el último partido del año. Será el domingo a las 18.00 horas. Cinco días después recibirá al Covirán Granada en el Multiusos (3 de enero) y el viernes 10 cerrará la primera vuelta en la cancha del Gipuzkoa, segundo clasificado. «De estos tres partidos seguro que vamos a sacar alguna victoria y eso va a reforzar nuestro trabajo».
El Coruña, con dos victorias más (9) que el Cáceres, llega a la cita del domingo tras encajar una dolorosa derrota ante el Leche Río Breogán, que le sacó 42 puntos de ventaja (97-55). «Seguro que les habrán apretado las tuercas», cuenta Parejo, que ve a su equipo con capacidad para competir y sacar la victoria ante un Coruña «que ahora mismo es un rival directo. Es un equipo muy físico, con mucha intensidad, parecido a nosotros», analiza.
El conjunto gallego está siendo muy fiable en su pabellón, donde ha sido capaz de ganar al Palencia (82-76) y al Valladolid (83-81), aunque ha cedido dos partidos, contra Lleida en la primera jornada (65-82) y ante el Oviedo en la séptima (78-81).
Mientras tanto, el Cáceres sigue trabajando en un sustituto para Kosta Jankovic, que a principios de la semana pasada abandonó la disciplina del conjunto verdinegro. «Tenemos dos posibilidades sobre la mesa», adelantó la semana pasada el técnico Roberto Blanco, que reconoció que le gustaría tenerlo cuanto antes «porque en el día a día necesitamos unos más».
