Valentino Rossi (Yamaha) se impuso ayer en la carrera del MotoGP del Gran Premio de la República Checa, al beneficiarse de una caída de Casey Stoner (Ducati), cuando el australiano iba líder, mientras que Toni Elías (Ducati) acabó segundo tras una sensacional remontada. Con este triunfo, Rossi deja el mundial poco menos que sentenciado, ya que suma veinticinco punto más y ya saca cincuenta de ventaja al australiano, a falta de seis carreras. Los otros dos españoles en la prueba, Jorge Lorenzo (Yamaha) y Dani Pedrosa (Honda), cuajaron una decepcionante actuación, al concluir la carrera del MotoGP en Brno en décima y decimoquinta posición, respectivamente. Las quejas de los pilotos que llevan Michelin arreciaron otra vez.

En 250 cc, Alex Debón (Aprilia) logró la victoria tras realizar un gran adelantamiento al líder del mundial, Marco Simoncelli (Gilera), que acabó tercero.

La victoria estaba en las manos del italiano, pero a falta de tres curvas, Debón le realizó un magistral adelantamiento y, tras él, también se coló Alvaro Bautista (Aprilia), que concluyó segundo y dejaron a Simoncelli sin opción en la recta de meta.

El piloto Stefan Bradl (Aprilia) fue el vencedor en la carrera de 125, en la que el español Joan Olivé (Derbi) también subió al podio, al quedar tercero, detrás del líder del mundial Mike di Meglio (Derbi). Con este tercer puesto, Olivé sube por cuarta vez al cajón este año, después de tres segundos puestos, y tras haber mantenido un pulso con el vigente campeón del mundo, el húngaro Gabor Talmacsi, hasta la misma línea de meta.