Acaba el Mundial del 2007 y lo hace mirando inmediatamente al futuro. Un recorrido a través de sus protagonistas habla de lo que ha pasado, pero también de lo que va a pasar.
Stoner arrasó
Lo que se suponía que iba a ser el duelo Valentino Rossi (Yamaha) contra Dani Pedrosa (Honda) se convirtió en un paseo triunfal del australiano Casey Stoner, la modesta y familiar factoría italiana Ducati y la explosiva marca de neumáticos japoneses Bridgestone. Bridgestoner ganó el título de MotoGP tres carreras antes del final, venció en 10 grandes premios (Pedrosa ayer evitó que igualase la marca de 11 triunfos en una misma temporada) y se subió al podio en 14 de las 18 carreras disputadas. Su dominio ha terminado desquiciando a Rossi, que ha criticado a Yamaha, ha montado el gran número para cambiar sus Michelin por los Bridgestone del campeón y ha provocado en el seno de Honda una gran crisis.
Enfadado Rossi
Cuando, en el 2004, Valentino Rossi dejó Honda y firmó por Yamaha lo hizo para demostrar (y así lo dijo) que sus manos eran quienes marcaban la diferencia y no la moto alada ni los neumáticos que Michelin le fabricaba, expresamente para él, la noche anterior a la carrera. Ahora las manos de Rossi no solo no marcan la diferencia, sino que se dañan, por sus caídas. "El subcampeonato no lo he perdido yo, lo ha perdido Yamaha. Yo soy Valentino Rossi y no puedo llevar una moto así". Autor de cuatro victorias, Rossi ha acabado y reuniéndose con sus abogados para ver cómo resuelve la deuda que la Hacienda italiana dice que tiene con ella y que asciende a 112 millones de euros.
Buen balance español
La flotilla española despidió ayer otro brillante Mundial en el que Jorge Lorenzo (Aprilia, 250cc) logró el título número 31 del palmarés español, mientras que Dani Pedrosa (Honda, MotoGP) y Héctor Faubel (Aprilia, 125cc) se consolaron con dos meritorios subcampeonatos que les sabe a poco, pero que demuestran que siempre estuvieron cerca de la victoria. De los 52 grandes premios disputados, los pilotos españoles sumaron 19 victorias (9 de Lorenzo; 5 de Faubel; 2 de Pedrosa y Alvaro Bautista, y una de Sergio Gadea), al margen de numerosos podios. El 2008 se presenta como el gran pulso entre Pedrosa y Lorenzo, la gran oportunidad de Bautista para ganar el dos y medio y, tal vez, la explosión de Pol Espargaró en 125cc.
Cambio generacional
El 2007 ha significado la última estación para dos auténticos gladiadores que, posiblemente, no han triunfado todo lo que merecía su larga y dilatada trayectoria. El brasileño Alex Barros (37 años, 276 grandes premios y 7 victorias) corrió ayer la última carrera de su vida, y Carlos Checa (35 años, 220 carreras y 2 triunfos) ha decidido matricularse en el Mundial de Superbikes con la campeona Honda. En su lugar aparecerán tres cachorros: Jorge Lorenzo (20 años), Andrea Dovizioso (21) y Alex de Angelis (23).
´Arranca´ el 2008
El Mundial-2008, que empieza mañana en Valencia con los primeros ensayos oficiales, no solo vivirá del duelo Stoner-Pedrosa, de la resurrección de Rossi o del debut de Lorenzo en la categoría reina, también tendrá otros muchos alicientes, cuya punta de iceberg se detectó ya en Valencia. Como ese Pol Espargaró, de 16 años, intentando coronarse rey de 125cc con la bala roja de Derbi. O un cautivador Alvaro Bautista buscando el bi en 250cc tras su coronación en 125cc (2006). O el veterano Alex Debón, que ayer, con 31 años, logró su primer podio tras ejercer todo el año de escudero, entrenador, maestro, protector y asesor de Jorge Lorenzo, que acabó su singladura en el dos y medio de la manera más hermosa que existe: aplaudiendo a su maestro bajo el podio.
A ese tren espera subirse pronto el almendralejense Santiago Barragán, que ayer consiguió terminar la carrera de 250cc en vigesimocuarto puesto. "He adquirido experiencia, que para mí es lo importante", afirmó el joven piloto de Team Extremadura.
Citas para la afición
El Mundial del año que viene seguirá teniendo tres citas en circuitos españoles. Las audiencias televisivas continúan siendo espectaculares y la afición española sigue acaparando la atención mundial y es, sin duda, la más fiel de todas, no tanto porque sus pilotos peleen siempre por la victoria o los títulos como por el hecho de que sus organizaciones y circuitos gozan de enorme prestigio en el paddock del campeonato. A los récords de audiencia logrados por Televisión Española y de público en Jerez y Montmeló, se añadió el enorme gentío que apareció ayer en Cheste (Valencia), donde hubo 132.500 espectadores. Por si desean planificarse el futuro, anoten los tres citas del próximo año: Jerez (30 de marzo), Catalunya (8 de junio) y Valencia (26 de octubre).
