Dani Alves es uno de los jugadores más peculiares de la Liga. Siempre en el centro de la polémica, el lateral brasileño del Barça sorprendió a todos los aficionados que se encontraban en el Camp Nou en la víspera contra el Espanyol.

El blaugrana vió que en el banquillo se encontraba un chico con discapacidad junto a su compañera sentimental Joana Sanz, a la que imitó después de la eliminación de su equipo en Champions con una gran polémica posterior. El jugador no lo dudó un momento y fue derecho hacía el chico, lo cogió en volandas y lo llevó hasta medio campo para que el joven pudiera hacerse una fotografía con él desde una posición privilegiada. Tras ello, acabó estrechando la mano de sus familiares que radiaban de felicidad por el pequeño guiño que había tenido el lateral blaugrana con el joven.