Mereció más el Badajoz en su visita al Granada B en un partido en el que los de Juan Marrero disfrutaron de las mejores ocasiones (0-0). El cuadro pacense consiguió anular casi por completo la generación de juego local y dejó prácticamente sin ocasiones a los rojiblancos en una segunda mitad de dominio extremeño tras un primer acto con posesión y llegadas más alternas. Por otra parte, una de las anécdotas del partido se produjo cuando el trencilla obligó a los visitantes a jugar con la segunda indumentaria nazarí debido a la supuesta coincidencia de colores blancos en la zona de los dorsales.

El balón echó a rodar sobre la Ciudad Deportiva de la Diputación de Armilla y lo hizo con un color algo más blanquinegro. El equipo blanquinegro tenía más la posesión de la bola y disfrutaba de un relativo control del choque en los primeros compases del mismo, mostrando estos una declaración de intenciones a su rival, al cual no querían concederle ocasiones que pudieran sorprenderles desde el inicio, sabedores del potencial rojiblanco. Tanto fue así que Álex Rubio y el ex capitán nazarí Sergio Martín se asociaron a la perfección para que este último probará fortuna con un soberbio lanzamiento que tan solo la suerte evitó que fuera gol, al marcharse el cuero junto al poste.

OCASIONES FALLADAS / El conjunto local no tardó en responder y una subida por banda del lateral Paco Torres finalizó con el balón colgado al área para que Pablo González recibiera y tras revolverse y zafarse de su par enviara la bola junto a la madera. Con una ocasión para cada conjunto, y las cartas ya sobre la mesa, fue de nuevo el equipo pacense el que lo intentó. En esta ocasión a balón parado y con Sergio Martín haciendo funciones en el servicio de la bola. El centro de este conectó con Rafa García, mandando el espigado central el balón por encima del larguero tras haber ganado la posición a los zagueros.

El intercambio de golpes continuó y ahora correspondía al bando dirigido por Pedro Morillas poner una nueva llegada. Un balón filtrado entre líneas sobre la carrera de Pablo González terminó finalmente en las manoplas de Néstor, que respondió bien a la clara oportunidad del ariete granadinista. Tras esta serie de llegadas y reparto con reparto de ocasiones, el juego comenzó a volverse más espeso.

LUCHA ABIERTA / Ambos equipos no encontraban la forma de penetrar con facilidad en las áreas y al balón le costaba ganar metros. Los errores en los pases y la seguridad defensiva, unido a una clara intención de no dilapidar opciones de llevarse el triunfo en la segunda mitad hizo que no se produjera verticalidad en el juego, guardando la ropa los dos contendientes para una vibrante segunda parte.

Las instrucciones en los vestuarios no parecieron surtir un gran efecto. La reanudación no deparó grandes novedades. Lo más significativo fue sin duda la acción que protagonizó el conjunto de la ciudad de la Alhambra. Pablo González, que estaba en todas las jugadas peligrosas de los rojiblancos, recibió un centro desde el costado zurdo que el delantero nazarí cabeceó de forma soberbia a portería haciendo estirarse a Néstor, que sacó una mano prodigiosa para abortar el testarazo cuando ya se cantaba el tanto local.

El Badajoz sin embargo no se descompuso ante este gran susto y decidió aportar tranquilidad a su juego y más seguridad a sus pases, evitando males mayores. El cuadro entrenado por Juan Marrero fue el siguiente en disponer de una ocasión y Ruano con un lanzamiento desde lejos casi sorprende a Aarón.

El disparo tocó en un defensor cuando ganaba portería y finalmente la bola se marchó ligeramente por encima del travesaño. La acción espoleó a los extremeños, que volvieron a gozar de otra gran opción para subir el primer tanto al marcador con un remate con la testa de Javi Rey en un balón colgado al segundo palo desde un saque de esquina que incomprensiblemente mandó arriba cuando lo tenía todo a favor para marcar.

El Badajoz ya se había dueño del partido y aunque la posesión del cuero estaba dividida, es cierto que el cuadro pacense tenía las ideas más frescas para generar ocasiones y volvió a demostrarlo en un centro del recién ingresado al terreno de juego José Ángel que remató Juanma al palo en otra nueva oportunidad para haber podido adelantarse.

Tuvo otra disparo más Ruano que de nuevo se marchó alta y una última a cargo de José Angel con otro chut que se mandó por enésima vez por encima de los tres palos en un final con claro color blanquinegro frente al una escuadra nazarí que careció de ideas y llegadas en casi todo el segundo tiempo y que pudo dar gracias tras las ocasiones extremeñas de sumar un empate ante un Badajoz al que el empate a buen seguro le supo a poco.

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3Árbitro: Sánchez López, del colegio murciano. Amonestó a los locales Fran Serrano, Pablo Vázquez y Pablo González y a los visitantes Álex Rubio y Jesús Muñoz.

3Estadio: Campo de la Diputación.

3Espectadores: 600.

3Granada B: Aarón; Serrano, González, Vázquez, Torres (Marín, min. 81); Isi, Neva (Morillo, min. 58); Pablo González, Grande (Juancho, min. 58), Castellano; Casi.

3Badajoz: Néstor; Chechu, Rafa García, Jesús Muñoz, Gabri; Joaqui Flores (José Ángel, min. 59), Javi Rey, Sergio, Ruano; Juanma (Romero, min. 88), Álex Rubio (Rubén, min. 72).