Habla claro José Manuel Sánchez, presidente del Cáceres Patrimonio. El dirigente del club extremeño de la LEB Oro dice, convencido, que el equipo va a conseguir la permanencia en la categoría, pero para ello pide más ayuda de la afición. Al mismo tiempo, apunta que la directiva no se ha equivocado, tampoco con el despido del técnico, Ñete Bohigas.

--Acumula ya 13 años como presidente del Cáceres, 12 en competición. ¿Esperaba permanecer tanto tiempo al frente del club? ¿Cuál es su balance?

--El balance es bueno. Podíamos haber optado a algo más, pero con los recursos que tenemos en Extremadura no está mal. Tenemos baloncesto en la ciudad, una cantera estupenda y este deporte se ha seguido manteniendo aquí. Tenemos que esperar a que vengan mejores tiempos y sacar beneficio de ello.

--¿Cuánto tiempo seguirá?

--No hay plazo fijo. Lo mismo cuando termine la temporada, dos años más, tres… depende de lo que necesite el club. Yo estoy muy agradecido a los empresarios por la confianza. Sin ellos, este club no estaría funcionando. Por mi parte, cuando termine todo volveré a la grada.

--¿Volverá la ACB a Cáceres?

--Sí que lo creo. Estamos en una tierra en la que, desgraciadamente, hay poco mundo empresarial y eso se nota mucho. Aquí, o tenemos apuestas fuertes de las instituciones para que haya un club arriba o está complicado. De todas formas, se lo deberían pensar bien porque transmite muchas cosas a las ciudades y a las regiones. Extremadura se debería plantear tener un equipo en la máxima categoría, tanto en fútbol como en baloncesto, que son los que más tirón tienen. Aparte de los valores propios del deporte, de compañerismo, de solidaridad y de entrega, trae otras cosas a las ciudades. Se deben plantear apostar más fuerte por el deporte, como están haciendo en otras regiones. Por eso la LEB Oro se ha complicado tanto: porque hay ciudades que han hecho esa apuesta por el mundo del baloncesto.

--Hace tres años decía en una entrevista en este diario que el club estaba cerca de la estabilización. En lo institucional ya no se habla de las dudas de salir en LEB Oro cada año, eso es verdad, pero en lo deportivo hay quien asegura que se han dado varios pasos atrás. ¿Qué tiene que decir a ello?

--Más o menos lo mismo que he comentado antes. Desde que hay posibilidades reales de subir y bajar desde la ACB todo ha cambiado. Hay clubs que han tenido una inyección económica grandísima. La liga se ha hecho más fuerte y nosotros seguimos con el mismo presupuesto de hace cuatro años. Eso se nota que los jugadores realmente buenos piden más y hay mejores equipos. Nosotros nos mantenemos como podemos y trabajando mucho en verano buscando jugadores. Y gracias a que el club tiene cierto prestigio y renombre en el mundo del baloncesto y hay jugadores que quieren venir a Cáceres. Pero nos cuesta tenerlos porque la competición ha subido de nivel.

--Mediados de marzo y el Cáceres está en posición de descenso. ¿Qué ha ocurrido?

--Han pasado muchas cosas. A principios de pretemporada, nada más llegar, se nos lesiona el base que traemos para que sea titular o lleve las riendas del equipo. Ha estado fuera tres meses. Además, se nos va el pívot americano que trajimos como referencia. Hubo cambios, algunas lesiones importantes… además de la subida de nivel de la liga. Nosotros llegamos hasta donde llegamos. El trabajo es importante, pero si el resultado no te llega al final acabas ahí. De todas maneras, ahora tenemos plantilla para salir de ahí y estoy convencido de que lo vamos a hacer. Es más, dentro de poco vamos a estar fuera del descenso, en una semana.

--Pero, evidentemente, esta situación no es la prevista.

--Claro que no. Nosotros siempre hemos apostado por estar de la mitad de la tabla hacia arriba. La ilusión y las ganas las hemos puesto siempre para que Cáceres esté lo más arriba posible. Las circunstancias nos han hecho estar ahora abajo. Al final, la presión no es la misma que si se está en la mitad de la clasificación. Son muchas razones, pero estoy seguro que saldremos.

--¿En qué se han equivocado desde la directiva?

--En la directiva no nos hemos equivocado en nada. Se han conseguido algunas empresas más porque Sergio Pérez (el gerente) se lo ha trabajado bien y ha logrado un poquito más de dinero, pero no llegamos al nivel económico de otros clubs. Tenemos que fichar lo que podemos con nuestra economía. Nos hemos equivocado, si acaso, en que no tenemos más dinero, pero en el aspecto deportivo se ha traído todo lo que estaba en nuestra mano.

--El despido de Ñete Bohigas, al menos en resultado, no ha parecido la solución. ¿Se arrepienten de ello?

--No nos arrepentimos de las decisiones porque cuando se toma una decisión, aunque sea dolorosa, se toma. Te puedes equivocar en el largo plazo. En este momento creemos que hicimos lo que teníamos que hacer, igual que se han cambiado jugadores o se han decidido otras cosas. Pensábamos que había que hacer ese cambio y creo que el entrenador que está ahora está supercapacitado para desempeñar su labor y para salvar al equipo. De todas formas, que la gente vea que al final vamos a estar salvados y no nos arrepentiremos de nada.

--¿Y de los jugadores? ¿Cree que no están respondiendo a las expectativas? ¿Tiene algún nombre que le ha defraudado?

--Los jugadores están dando todo lo que tienen. Jugar con esa presión no es fácil. A lo mejor hay algunos que no están acostumbrados. El Cáceres nunca ha estado en esta tesitura; siempre hemos estado más arriba, más bien rozando la parte de la mitad de la tabla hacia arriba o un poco hacia abajo. En los entrenamientos dan todo lo que tienen. ¿Cuándo hemos visto a Rakocevic hacer 0 de 7? Nunca. Eso es por la presión. A partir del partido de Sevilla, pese a perderse, se puede pensar en mejorar. Se vieron cosas muy buenas. Los jugadores estuvieron con una gran confianza y ganas de vencer. Lo único malo es esa tensión de estar abajo. Este deporte es de mucha precisión.

--Hay menos gente en el pabellón este año. ¿Lo ve normal?

--No mucho, pero un poquito sí que me ha defraudado la afición. Creo que el que es aficionado tiene que responder no solamente en la victoria, sino en las duras y en las maduras. Necesitamos ahora mucho a la afición, que es fundamental. Si no están, se nota esa presión. Rakocevic me decía que no entendía que se le pitara en su propia casa, que eso le afecta mucho. Creo que debemos apoyar al equipo hasta el final, y que entonces, en ese final, ya se verán los resultados y las decisiones que haya que tomar. En estos momentos debemos apoyarnos todos. El Cáceres es de Cáceres y de los cacereños, los jugadores se irán, pero el baloncesto se queda aquí. Si no lo apoyamos...

--Si el equipo baja a LEB Plata, ¿seguirá teniendo futuro el Cáceres?

--Claro. ¿Por qué no? Ya hemos estado en Plata y hemos subido. Sería un palo bajar, pero no olvidemos que esto no deja de ser una competición, que también se resurge de sus cenizas. El sábado hablaba con el presidente del Betis, que decía que fue duro bajar de ACB tras mucho tiempo, pero ahí están, con el 95 por ciento de posibilidades de ascender. Hay que ser fuertes y seguir. Si eso ocurre, habría que subir otra vez, pero eso no va a pasar, como he repetido antes varias veces.

--¿Como es la relación del Cáceres con las instituciones? ¿Cuál es ahora el momento?

--Siempre hemos tenido una buena relación con todas ellas. Evidentemente que nos gustaría que nos dieran más dinero y nos lo dieran en tiempo porque nos cuesta dinero que se retrasen tanto las subvenciones. Y es que tenemos que ir a los bancos a que nos lo adelanten para poder pagar a los jugadores, que para nosotros es fundamental que estén al día. Además, nos gustaría que se colaborara buscando empresas, que ellos tienen más posibilidades y relaciones.