Antonio Martín Oncina nació en Plasencia hace 54 años. Trabaja con una inmobiliaria y también en seguros. Y preside desde hace doce el club de baloncesto de la ciudad, del que anteriormente fue jugador y directivo. Ahora, el equipo está de moda en el mundo de la canasta español gracias a su espectacular comienzo liguero en la LEB. Los jugadores buscarán mañana en Melilla prolongar una racha fantástica.

¿Es su momento más feliz desde que llegó a la presidencia?

--Sí, pero también ha habido otro: cuando jugamos la fase de ascenso a la Liga ACB en el 94. Nos eliminó el Cornellá en la Final a Ocho en Gijón. Ahora hay una gran ilusión en la ciudad, arrastrando a mucho público a los partidos por el nivel del equipo y de la competición.

¿Cuáles son las claves del éxito?

--Trabajo, trabajo, trabajo. Trabajo desde la junta directiva, configurando la plantilla y fichando a un entrenador como Dani García joven, trabajador y con experiencia. Era lo que queríamos. Elaboramos un equipo que tuviese el trabajo como bandera... y con calidad. En esto del baloncesto, es tan importante la calidad como sudar la camiseta y morir en la cancha. Este cóctel funciona en los partidos. Es inesperado, pero no casualidad. Es fruto del trabajo, la ilusión y el empeño que pone una afición como la del Plasencia.

¿Se replantea nuevos objetivos tras ganar los seis primeros partidos?

--A corto plazo, no. La meta tanto de la directiva como del entrenador es conseguir esas doce o trece victorias que nos den la tranquilidad con la permanencia en la LEB. Cuando llegue ese momento, nos plantearemos lo que vaya pasando día a día. Pero sabemos que por nuestra infraestructura y nuestro potencial económico que a lo único que podemos aspirar es a hacer el mejor papel posible.

¿Hay base económica para el proyecto?

--El presupuesto de la temporada está hecho desde el rigor y la seriedad, basado en la experiencia de otros años. Me siento orgulloso de las diez personas que conforman la directiva. El 30% del presupuesto procede de las instituciones y el 70% restante es fruto de la gestión de todos los directivos.

Es evidente que está satisfecho de la respuesta de la afición...

--Es magnífica. Hemos superado los mil abonados y hemos llenado el pabellón para reventar. Tener una respuesta así de la afición también es importante para un proyecto de futuro.

¿Se está estudiando la ampliación del pabellón?

--De momento no. Queremos consolidarnos con la capacidad que hay ahora y hay que esperar que en el futuro vaya a más. A este pabellón se le puede sacar mucho más partido de lo que se cree. La gente está muy holgada, pero como es una cosa de futuro, ahora mismo ni nos lo planteamos.