«No ha sido la temporada que esperábamos, por eso vamos a reaccionar con fuerza». Así comenzó Florentino Pérez la presentación de Luka Jovic como nuevo jugador madridista, la primera de la semana del desfile de la redención blanca, que tendrá su punto álgido esta tarde (19.00 horas) con la puesta de largo de Hazard, la gran estrella. Ayer el Real Madrid anunció oficialmente la llegada de Mendy, el lateral izquierdo francés que llega a compartir puesto con Marcelo.

Jovic, el protagonista, estuvo sobrio, amparado en un imponente físico, impertérrito ante el discurso de su nuevo presidente y ante el primer contacto con la afición, donde cumplió con los tópicos de saludar, lanzar balones a la grada y besar su nuevo escudo, pero con austeridad y moderación, sin sonrisas, con la mínima expresión de las emociones. «Lo único que me inquietaba era el momento de saltar al césped», reconoció. Se presentó con mensaje de humildad y deseo de aprender: «Solo quiero entrenar y jugar bien, me da igual en qué posición. La competencia es muy grande, pero con esfuerzo puedo tener una oportunidad».