Finalizado el partido que ganó el sábado en el Camp Nou, no sin apuros contra el colista Xerez (3-1), el Barcelona arranca la semana más interesante de su calendario deportivo, ya que decidirá su futuro en la Liga de Campeones y también en el torneo nacional, en el que vive codo con codo con el Real Madrid.
No es la primera vez que el Barça llega con el agua al cuello este año, ni la temporada pasada, ya con Pep Guardiola al mando de la plantilla barcelonista.
Sin ir más lejos, durante la fase de grupos, la visita del Inter era de vital importancia, ya que una derrota sumada a un resultado desfavorable en el otro partido del grupo dejaban al Barça fuera de la Liga de Campeones.
El conjunto catalán respondió a las expectativas y ganó con toda solvencia por 2-0 a los de José Mourinho, resultado que el miércoles le bastaría al equipo azulgrana para remontar la eliminatoria y jugar la final de Madrid el 22 de mayo. El Barcelona acabó como primero de grupo.
De hecho, acabado el partido contra el Xerez, se ha puesto en marcha una potente maquinaria en el entorno azulgrana, como nunca antes se había visto, que ha impregnado desde el propio club a sus asociados, seguidores y medios de comunicación, con el fin de aunar fuerzas para el envite del miércoles contra el Inter, en la vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones, cuya ida acabó con 3-1 para los interistas.
APOYO El club azulgrana no ha ahorrado esfuerzos en solicitar la ayuda de su masa social y de aficionados para el partido más relevante de la temporada, ya que de no superar el 3-1 quedará apeado de la competición.
En el otro foco de atención, el Barcelona no ha podido romper con la distancia de un punto que le separa del Madrid. Derrotado el colista, al Barcelona se le presenta la semana que viene uno de los últimos cuatro rivales que le quedan para asaltar el título, quizá, el más potente de todos, el Villarreal.
CITAS CLAVES El partido se jugará el sábado en el estadio levantino (22.00 horas), donde el conjunto catalán ha sufrido mucho en los últimos años.
El Barça aún tendrá otra dificilísima salida, como es la visita al campo del Sevilla, aunque por esas fechas el conjunto hispalense podría estar ya preparando la final de la Copa del Rey, que se jugará en Barcelona, cuya fecha está a expensas de lo que haga su contrincante, el Atlético de Madrid, que aún debe jugar la vuelta de las semifinales de la Liga Europa contra el Liverpool en Inglaterra, tras arrancar un valioso 1-0 en el Calderón.
Ante este panorama Guardiola podrá contar con todos sus efectivos, a excepción del lesionado Andres Iniesta, y a la espera de cómo evolucione el lateral Eric Abidal, quien no acaba de arrancar tras la lesión muscular que sufrió hace unos meses.
Ayer el Barcelona volvió a entrenar en su Ciudad Deportiva, a puerta cerrada y con la colaboración de cuatro jugadores del filial. El trabajo ha sido de recuperación y hoy se espera que el grupo intensifique el trabajo de cara al partido del miércoles.
Mientras, el Madrid está pendiente de lo que suceda y podrá preparar su próximo encuentro, ante Osasuna en casa, con mayor tranquilidad, aunque no recuperará ni a Van der Vaart ni a Raúl, lesionados en La Romareda. Con el triunfo en Zaragoza igualó el mayor número de victorias conseguidas por un equipo en una misma temporada, con 28 partidos ganados.
