ARROYO CP - 0: Juanma; Manu, José Rodríguez, Bayón, Castaño; Abel Buades, Juanjo, Bezares (Ezequiel, min. 75), Ruano, Juanfran Espinar.

CORDOBA B - 2: Razak; Pedro, Lucena (Cristian, min. 20), Bernardo, Fran González: Gonzalo (Mané, min. 46), Sebas Moyano; Gálvez, Juan Guerra (Zafra, 85), Adri Cuevas; Dani Espeso.

GOLES: 0-1 (69I) Fran González. 0-2 (83I) Mané.

ARBITRO: Alberola Rojas (Manchego). Tarjetas amarillas a Juanma, Espinar; Mané, Fran González, Gonzalo, Adri Cuevas. Tarjeta roja a Castaño (25) y al técnico Juan Marrero (83).

El Córdoba B consiguió su tercera victoria de la temporada a costa del Arroyo. El conjunto de Antonio Romero aprovechó el desconcierto local tras algunas decisiones polémicas del colegiado Alberola Rojas y, con goles de Fran González y Mané consiguió un triunfo vital.

El Arroyo vio como le expulsaban a Castaño a los 25 minutos de juego y Juan Marrero, el entrenador local, también se fue a vestuarios expulsado por roja directa en el 83. La actuación del colegiado marcó el desarrollo de un partido en el que los extremeños merecieron mejor suerte pero acabaron sumando su segunda derrota en casa, quedándose con 20 puntos y camás cerca de puestos de descenso.

Lo cierto es que el Córdoba B se mostró muy serio durante todo el encuentro, si bien incluso jugando gran parte del partido con un hombre más no inquietó demasiado la portería de Juanma, aunque pudo en la segunda mitad certificar la victoria con dos goles. Y todo el desarrollo del partido estuvo marcado por la actuación del colegiado Alberola Rojas, claro protagonista de un choque muy igualado en prácticamente todos sus tramos.

El colegiado castellano-manchego expulsó en el minuto 25 al arroyano Castaño. En un lance tratando de proteger el balón, Castaño propició un golpe a un delantero visitante, el árbitro no lo dudó y le expulsó de inmediato. La acción fue muy protestada por los locales, que reclamaron no solo que no fue expulsión sino que esa jugada se repetiría varias veces a lo largo del encuentro sin amonestación.

Los primeros minutos habían sido del Arroyo, sin embargo el empuje posterior del Córdoba B reflejó el hecho de que el conjunto verdiblanco saltó al campo fiero, bien advertido del juego intenso de los de Marrero.

Poco cambió eso sí el juego tras la expulsión de Castaño. El dibujo sí lo hizo, recomponiéndose, donde Buades pasó a formar como central, Bezares se multiplicó en el centro del campo y Juanfran ejerció de enlace entre los mediocampistas y la delantera. Así, Juanjo y Ruano, otros días desequilibrantes para los locales, no pudieron marcar diferencias en el partido, bien controlados y muy cansados. No hubo tampoco ocasiones claras en el primer tiempo.

SEGUNDA PARTE Ya en la segunda mitad se desperezó de una vez por todas el filial, hasta entonces más preocupado de mantener su portería a cero. Sebas Moyano fue el artífice de las mejores ocasiones visitantes, llevando el peso ofensivo de los suyos. A los de Marrero solo les quedaba intentarlo a balón parado, pero se topaban una y otra vez con Razak, el portero del Córdoba B que fue el mejor jugador de los andaluces en el partido.

La segunda jugada de la polémica, más decisiva aún que la primera, tuvo lugar en el minuto 69, cuando un remate de Fran González fue atrapado por Juanma sobre la línea de gol. Entonces el trencilla corrió hacia el centro del campo, con los jugadores de uno y otro equipo contemplando la escena incrédulos. Así, el árbitro concedió validez al gol con todo el campo protestando por lo que parecía claramente un balón no de gol, ya que ni siquiera los cordobesistas presionaron para que el colegiado lo concediese.

Las protestas se saldaron con una amarilla para Juanma, y una afición enfurecida. Aún con esto, los locales se rehicieron y gozaron de buenas ocasiones por medio de Espinar y Juanfran.

Sin embargo, la sentencia para el filial del Córdoba llegaría en el minuto 83 y acabaría por detonar los ánimos de los locales. El tanto de Mané llegaría tras una jugada dudosa, donde se pidió fuera de juego, y el técnico local Marrero fue expulsado después por las protestas.

Ya con el partido decantado para los andaluces, el colectivo arbitral llevó a cabo su tercera decisión controvertida en la que tras una pugna dentro del área Juanfran anotaría, pero el gol fue anulado por fuera de juego. Los gritos contra el equipo arbitral subieron en decibelios cuando el árbitro señaló el final del partido. Al final, victoria vital para un Córdoba B y derrota para un Arroyo que se complica.