La selección española de balonmano tratará de alcanzar por cuarta vez en la historia las semifinales de un Mundial, para lo cual el conjunto que dirige Juan Carlos Pastor deberá imponerse no sólo ya a la rocosa Alemania, sino también a los 18.500 aficionados germanos que abarrotarán las gradas del Kolnarena. Será a partir de las 17.30 horas (La 2).

Todo un reto para el equipo español, que confía en poder cuajar ante el cuadro teutón, el partido "completo" que viene reclamando desde el inicio del torneo el seleccionador, y que por unas causas u otras, España todavía no ha acabado de realizar.

Con el extremo derecho Roberto García totalmente recuperado, tal y como quedó demostrado en el encuentro del pasado domingo ante Croacia, la selección española afrontará los cuartos de final con todos sus integrantes en perfectas condiciones, algo indispensable para ganar al conjunto alemán.

LUCHA ABIERTA Un triunfo que, como aseguró Juan Carlos Pastor, tan sólo será posible si los internacionales españoles logran marcar el ritmo de juego del partido, para lo que es imprescindible no sólo ya una sólida defensa, sino, sobre todo, evitar caer en el ataque directo que tanto beneficia al cuadro alemán.

La velocidad de los extremos Florian Kehrmann y Torsten Jansen, así como de los laterales Christian Zeitz y Pascal Hens, infalible en la segunda oleada de contragolpe, convierten en un seguro gol en contra cada balón perdido en ataque.