La selección española de fútbol sala disputará esta mañana (9.00 hora española, televisado por Localia) la tercera final de su historia en un Mundial, tras derrotar a Brasil en semifinales, y lo hará contra su bestia negra en los últimos encuentros, Italia, que venció a Argentina en la otra semifinal.

"Venganza deportiva", esas son las dos palabras que más se han escuchado en las últimas horas en la concentración del combinado nacional. Y es que Italia eliminó a los españoles en las semifinales del último campeonato de Europa, disputado en Italia, y ha sido la única en derrotarla en el actual campeonato del mundo.

Será una final en la que se medirán el actual campeón de Europa con el del Mundo. Los de Javier Lozano llegan a este partido con la moral por las nubes. El triunfo, aunque fuera en la tanda de penaltis, contra Brasil ha recordado a sus futbolistas quiénes son los actuales campeones mundiales.

Será un encuentro muy diferente al de la segunda fase. En esa ocasión, dos goles en propia puerta certificaron el triunfo italiano 2-3. Eso hirió el orgullo de los hispanos, que intentarán desactivar el juego defensivo de su oponente, plagado de brasileños nacionalizados.