ARGENTINA: Oscar Ustari, Julio Barroso, Gustavo Cabral, Gabriel Paletta (Ezequiel Garay, m.90), Lautaro Formica, Pablo Zabaleta, Juan Manuel Torres, Rodrigo Archubi (Fernando Gago, m.63), Neri Cardozo, Lionel Messi y Pablo Vitti (Gustavo Oberman, m.46).

ESPAÑA: Biel Ribas, Molinero, Alexis, Robusté, José Enrique Zapater (Víctor, m.83), Markel, Juanfran (Gavilán, m.75), Cesc, Silva y Llorente (Jona, m.75).

GOLES: 1-0, m.18: Zabaleta. 1-1, m.32: Zapater. 2-1, m.70: Oberman. 3-1, m.73: Messi.

ARBITRO: Benito Archundia (MEX). Tarjeta amarilla al argentino Torres y a los españoles Jona, Víctor y Alexis.

La selección española quedó eliminada del Mundial Sub 20 al perder en cuartos de final con Argentina (3-1) tras un partido en el que el equipo español fue de menos a más pero en el que su falta de puntería le condenó ante un contrario que no dejó escapar sus ocasiones.

España se encontró con una situación desconocida en la competición: un marcador adverso. Al equipo español le costó, pero finalmente serenó su juego. Superada la media hora de juego, a Argentina, que se empleó con dureza, le costaba más manejar el centro del campo.

La mejoría española se reflejó en el marcador con un gol de Alberto Zapater en el que, una vez más, Fernando Llorente fue protagonista, al dejar el balón con el pecho a su compañero para que, con un colocado disparo, el aragonés igualase el choque.

SEGUNDA PARTE La segunda parte se abrió con la misma intensidad que presidió la primera. La formación española se hizo con el centro del campo. La posesión del balón era netamente del equipo de Sáez, pero adoleció de más picardía. Sin embargo, el partido dio un giro extraño. Superados los veinte minutos de este segundo tiempo el juego bajó su ritmo, lo que benefició a la selección de Pancho Ferraro, que haciendo lo justo se encontró con dos goles a su favor en las dos primeras ocasiones de las que dispuso. Gustavo Oberman, en el minuto 70, y Messi, en el 73, no perdonaron como antes había hecho España.

Los goles cambiaron todo. El partido, se rompió, se puso como le gusta a Argentina, y así terminó por sentenciar el duelo. Adiós al sueño español.