España y Chile, que ya están virtualmente clasificadas para el Mundial 2014, miden fuerzas esta tarde (20.00 horas) en el estadio de Ginebra en un partido que sirve de banco de pruebas para sus seleccionadores.

Se ha convertido en un partido habitual del fútbol moderno y será la cuarta ocasión que España y Chile se enfrenten en los últimos cinco años. No ha cambiado la tendencia. Los españoles siguen sin encajar una sola derrota ante los chilenos. En el recuerdo un partido decisivo en su camino para ser campeón del mundo en 2010 en Suráfrica.

El último precedente, hace dos años en un amistoso en Sankt Gallen, España también venció (3-2). En nueve ocasiones se han enfrentado y ocho cayeron de lado español por un empate.

Para España el partido no tiene más importancia que mantener la imagen de un campeón del mundo y doble campeón de Europa. En Helsinki, su triunfo ante Finlandia (0-2), no mostró buen fútbol pero sí fue práctico. La victoria y el empate de Francia en Georgia significaron un paso de gigante al Mundial de Brasil. Vicente del Bosque tuvo que elegir en portería y volvió a decantarse por Iker Casillas. Ante Chile llega el momento de Víctor Valdés, protagonista de un gran inicio de temporada en el Barcelona. Será una de las numerosas novedades que introducirá el seleccionador español.

Las bajas en el medio centro provocaron que Mario Suárez jugase. Del Bosque acabó satisfecho y ahora le toca el turno a Javi García. Peores sensaciones dejó el experimento de Koke como lateral derecho, por lo que Alvaro Arbeloa recuperará su puesto, en principio.

Jugadores que iban a ser titulares ante Chile como Isco Alarcón y David Silva, han tenido que dejar la concentración por molestias. Provocan que Del Bosque maneje varias opciones en ataque. Quiere ver a sus nueves en acción. Tras marcar Negredo en Helsinki, le toca el turno a Roberto Soldado. Villa ha recuperado confianza.