La selección española no ha llegado por primera vez en su historia a unas semifinales de un Mundial para recrearse en su suerte y dejar de lado la ilusión que trajo hasta Suráfrica. Sin haber completado un partido redondo de verdad, España está a dos de alzar el título y todos los interesados tienen el derecho y la obligación de pensar que lo mejor está por llegar. "La unión de los jugadores es nuestra fuerza", dijo ayer Vicente del Bosque a propósito de la actitud de los que han participado menos hasta ahora. No puede manejarse otra idea después de haber sobrevivido a Paraguay y tener ahora por delante a Alemania, derrotada en la final de la Eurocopa y otra vez en primer plano tras una renovación significativa de jugadores y modelo.

Tanto el seleccionador como los jugadores creen que el equipo alemán ha sido el mejor hasta ahora y aspiran a que eso se traduzca en renovadas ganas de volver a superarles. "Esperemos que aún tengamos dos etapas por delante. No se trata ahora de dar las claves para ganar a nadie, lo que hay que hacer es intentar ser fieles a nuestro estilo, con este espíritu competitivo, y tener un poco más de regularidad, aunque creo que hemos hecho las cosas bien hasta ahora. No es momento para hacer balance y sí para seguir soñando", dijo ayer el seleccionador después de haber repasado el partido contra Paraguay y admitir de nuevo que se mostró demasiado autocrítico nada más finalizar el choque. "Se puede pensar que fue casi un milagro, pero en el balance total creo que fuimos superiores", añadió Del Bosque, que espera una Alemania mejor que la de la final de Viena de hace dos años, en el 2008.

TITULARIDAD DE TORRES Hablar de revancha no tiene sentido, según el seleccionador. "Dos años en fútbol es mucho tiempo, son muchos partidos jugados, mucha exigencia... Ellos van a tener el ansia de ganarnos y nosotros también tenemos el estímulo de superarles para estar en la final", añadió el técnico, que tiene la intención de repetir equipo, aunque ayer no fue tan rotundo en torno a la titularidad de Torres como tras el partido con Chile. La actuación de Cesc y los vídeos de Alemania pueden darle que pensar.

"Sigue siendo un referente nuestro, los demás están habituados a él y va a seguir siendo nuestro delantero. Puede pasar por rachas más o menos afortunadas como cualquiera", comentó sobre El Niño el seleccionador para aclarar a continuación: "Esto no es garantizar absolutamente nada a nadie, no quiere decir que vaya a ser titular indiscutible, aunque confiamos plenamente en él".

Quien no tiene por qué preocuparse en ese apartado es Casillas, con o sin la extraordinaria actuación que despachó el sábado. "Está en una línea de seguridad y madurez que transmite a todo el equipo. Es un líder fuera y dentro del campo", valoró Del Bosque.