La selección española finaliza ante Bosnia su exitoso camino al Mundial 2010, con un equipo de circunstancias, plagado de bajas, que buscará no perder la identidad en una cita que de nuevo puede inscribir el nombre de la Roja en la historia, si vence su décimo partido de clasificación.

Igualará España a dos selecciones míticas, la Brasil del 70 y Alemania del 82, si firma el pleno de triunfos en la fase de clasificación mundialista, venciendo en terreno bosnio donde no conoce la derrota en las dos visitas previas.

El objetivo de Vicente del Bosque, con la clasificación firmada hace meses con brillantez, era que la Roja no perdiese su identidad en los dos últimos encuentros, incómodos por largos desplazamientos y el poco nombre de los rivales. Lo tendrá difícil en Bosnia sin jugadores que marcan el estilo de una de las selecciones del momento.

Los días de concentración en Ereván han estado salpicados por una polémica que ha acabado por cansar a Del Bosque. Siempre estuvo el salmantino cerca de los jugadores en su carrera. No será menos como seleccionador. Para él son preferencia. Lo conduce a situaciones incómodas, como la que vive tras permitir el regreso a casa de Xavi Hernández, uno de los capitanes, por molestias en la rodilla.

GRANDES AUSENCIAS Desde Liverpool andan preocupados con Torres. En Barcelona también por Iniesta. Pero el seleccionador debía poner freno a una diáspora de jugadores que dejó el grupo de 24 en 19 y a él en problemas para alinear un once de garantías.

Porque no estarán jugadores como Xavi y Cesc, que marcan el estilo de toque. Ni la solidez defensiva de Puyol o la pegada de Villa. También ausentes Marchena y Guiza. Serias dudas Iniesta y Torres. El resultado: un equipo de circunstancias.

Encaja como puede sus piezas Del Bosque, que había diseñado dos equipos distintos para Armenia y Bosnia, y no podrá cumplir su deseo. Cazorla o Mata deben repetir de titular. Los problemas en la delantera provocan la primera titularidad de Negredo, el último en llegar al grupo, que anda como loco por marcar para reclamar su sitio en el Mundial.

Vuelve Casillas, para cumplir su partido 99 y quedarse a uno del centenario. Del Bosque entrega el mando a Xabi Alonso y Busquets. Confía en la genialidad de Silva para derribar la resistencia bosnia en un día de fiesta.

Se enfrentan primer y segundo clasificado. España con pase al Mundial. Bosnia con acceso a la repesca, dejando en el camino a una semifinalista de la última gran cita futbolística como Turquía. Todo condicionado por la climatología. La nieve recibió a la Roja en Sarajevo, y se espera -1 grado mañana en Zénica a la hora del partido (20.00).

Si España no llega con su mejor equipo tampoco lo hará su rival. Miroslav Blazevic, seleccionador bosnio, que tiene en mente reservar a sus mejores jugadores para evitar la amenaza de ser suspendidos por acumulación de tarjetas para la decisiva repesca. Tiene hasta diez de sus jugadores apercibidos. Un riesgo alto para un partido en el que solo está en juego el orgullo.

La realidad es que Blazevic se va a ver obligado a realizar una mezcla entre titulares y suplentes. No tiene suficientes jugadores como para hacer dos equipos distintos. "No pude dormir toda la noche pensando qué voy a hacer", admite el seleccionador, tentado también por el espectáculo y lo tentador de acabar la racha de la España campeona de Europa.

Están confirmados cambios en la portería, donde la lesión de Kenan Hasagic abre las puertas a Nemanja Supic, y también en la línea defensiva.