Iñaki Sáez, seleccionador nacional, ensayó en el entrenamiento vespertino con Raúl Bravo en el lateral izquierdo para cubrir la baja por lesión de Michel Salgado, que abandonó la concentración ayer mismo.

La mala noticia de la lesión de Salgado ha trastocado la alineación titular de Sáez, ya que le obligará a variar dos puestos. Así, Carles Puyol, que iba a actuar de lateral izquierdo, ocupará la banda derecha sustituyendo al futbolista del Madrid.

Tras lo visto en el entrenamiento de ayer por la tarde, el lateral izquierdo ya tiene dueño y ese será Raúl Bravo, defensa del Madrid que esta temporada ha actuado de central en su equipo.

El seleccionador ensayó varias opciones tácticas con su once de gala en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas con Dani Aranzubia en la portería y con Iker Casillas y Santiago Cañizares, que pugnan por la titularidad, realizando trabajo específico junto a los entrenadores de porteros, Pedro Jaro y José Manuel Ochotorena.

Según van pasando los días queda claro que Iñaki Sáez tiene muy pocas dudas sobre el once titular que se enfrentará a Rusia dentro de diez días en Portugal.Casillas; Puyol, Raúl Bravo, Helguera, Marchena; Albelda, Baraja; Etxeberria, Vicente, Raúl; y Morientes será casi con seguridad el primer once.

La sesión doble de trabajo que completó ayer la selección española de fútbol concluyó con una sesión de penaltis bajo un intenso calor, cerca de 32 grados de temperatura, y con la pasión de un centenar de adolescentes a los que Fernando Torres, Casillas, Luque y Puyol dedicaron 20 minutos de su tiempo para firmar autógrafos.

Los porteros Iker Casillas y Santi Cañizares fueron fusilados por Xabi Alonso, Torres, Joaquín, Luque, Gabri, Puyol, Valerón, Xavi, César y Juanito.

Hasta 20 lanzamientos consecutivos de los internacionales que se quedaron tras la conclusión de la sesión vespertina, acabaron en las redes ante la impotencia de los porteros, hasta que Iker se resarció con una ágil parada a lanzamiento de Luque.

Sólo el central César falló otro lanzamiento de penalti con un potente disparo que se estrelló en el larguero. La sesión acabó con los disparos, que también acabaron en gol, de los porteros. Iker superó a Cañizares con un disparo colocado, y éste le devolvió un colocado y potente lanzamiento imparable.

La calidad en todos sus lanzamientos la puso Valerón. Engañó con su cuerpo a los porteros en sus primeras intervenciones, y terminó demostrando que también hace buen uso de su potencia en una sesión impecable que culminó sin fallo.

CON LUPA Como Fernando Torres. Al niño siempre se le mira con lupa los penaltis. Transformó los cuatro que lanzó. Carrera corta y potencia en tres disparos cruzados, antes de probar a un lanzamiento de mayor calidad engañando al portero usando el interior del pie y ladeado. Su lanzamiento mejora desde la humildad, la que le lleva a quedarse a trabajar un punto que debe mejorar.

Mientras, en las gradas un centenar de adolescentes cantaban con pasión cada gol de los más de cincuenta penaltis que presenciaron. La pasión llegó cuando Carles Puyol, Iker Casillas, Albert Luque y Fernando Torres dedicaron veinte minutos para firmar autógrafos.