ESPAÑA: Hombrados; Víctor Tomás (6, 1p), Belaustegui (1), Juancho Pérez (1), Romero (2), R. Entrerríos (-) y Juanín (3, 2p) -equipo inicial- Barrufet (ps), A. Entrerríos (3), Uríos (2), Garabaya (1), Garralda (5), Davis (2) y Rodríguez (1)

CROACIA: Jerkovic; Zrnic (3), Metlicic (4), Balic (9), Lackovic (5), Vukic (5) y Vori (6) -equipo inicial- Alilovic (ps), Kaleb (-), Sulic (3), Dominikovic (-), Vukovic (-), Spoljaric (-) y Valcic (-)

MARCADOR CADA CINCO MINUTOS: 3-4, 6-5, 8-8, 8-10, 12-14, 12-16 (Descanso) 14-19, 16-22, 19-24, 23-27, 25-31 y 27-35 (Final)

ARBITROS: Lemme y Ullrich (Alemania).

La selección española de balonmano tendrá que pelear mañana ante Islandia por alcanzar una de las plazas que dan derecho a disputar los torneos preolímpicos, tras perder por 27-35 ante Croacia en un choque en el que demostró no haber asumido todavía la derrota ante Alemania.

Ayer la política de relevos de Juan Carlos Pastor no surtió efecto. El juego ofensivo del equipo español cayó en las precipitaciones --malos lanzamientos-- y las imprecisiones --perdidas de balón--, lo que permitió la fuga de los croatas en el tanteador.

Con cuatro goles de desventaja (12-16) se fue España al descanso, una renta demasiado grande para un equipo abatido tras los cuartos ante Alemania.

Ni el ´caramelo´ del preolímpico rescató a los españoles, que se desmoronó en la segunda parte ante la imposibilidad de rebajar rápidamente la ventaja balcánica. Diferencia que se situó a los diez minutos de la reanudación en seis tantos (16-22), que permitieron a los croatas afrontar con absoluta tranquilidad el resto del partido.