ESPANYOL 2: Lemmens, Torri (Velamazán, min.65), Lopo, Pochettino, Wome, Fredson, Morales, Hadji (Domoraud, min.74), Maxi (Raducanu, min.58), De la Peña y Tamudo.

MURCIA 0: Sánchez Broto, Juanma (Quintana, min.78), Cuadrado, Hurtado, Azcárate, Luis García, Jensen, Maciel (Tato, min.78), Richi (Valera, min.45), Gancedo y Karanka.

GOLES: 1-0, min.72: Tamudo. 2-0, min.80: Lopo.

ARBITRO: Carlos Megía Dávila (Colegio madrileño). Mostró la cartulina amarilla a Torricelli, Cuadrado, De la Peña, Morales, Jensen y Quintana. Expulsó a Raducanu en el 82.

El Espanyol, fiel a su imagen de equipo sufridor, tuvo que verse muchos minutos en Segunda División hasta que, a dieciocho minutos del cierre de la Liga, su capitán, Raúl Tamudo, lo dejó en Primera División y acabó con todas las polémicas sobre supuestas primas a su rival, el descendido Murcia.

La clave de la victoria, ratificada después con un segundo tanto de Albert Lopo, fue el empuje de una grada que reunió a 51.700 seguidores españolistas volcados con los suyos.

Una temporada infernal acabó en éxtasis colectivo en Montjuic, aunque hasta ese momento tocó sufrimiento, porque el Murcia aguantó 72 minutos con la portería a cero y porque el resultado de Valladolid condenaba al Espanyol a Segunda. Raúl Tamudo intentó evitarle la tensión a sus seguidores y, ya en el minuto cuatro, conectó con Iván de la Peña, pero su remate lo detuvo Sánchez Broto. El dominio abrumador del Espanyol lo rompía el Murcia en contadas ocasiones con tímidos contragolpes.

Moreno Torricelli le puso el gol en las botas a Raúl Tamudo en el minuto 27, pero no supo resolver ante Sánchez Broto.

MUCHA TENSION El nerviosismo por la trascendencia del partido calentó el ambiente. Pierre Wome probó fortuna, aunque sin éxito, desde fuera del área, con lo que se llegó al descanso.

El Espanyol salió a por todas en la reanudación. Las energías se acababan y el Murcia cada vez se movía con mayor comodidad sobre el césped. El técnico del Espanyol empezó a sumar efectivos en ataque con la entrada de Raducanu y Toni Velamazán. Luis García estrelló el balón en el travesaño a veinte minutos de la conclusión. Pero fueron Tamudo y Lopo los que desataron la euforia en Montjuic.