REAL SOCIEDAD 3: Westerveld; López Rekarte, Schürrer, Jauregi, Aranzabal; Xabi Alonso, Alkiza, Karpin, De Pedro; Kovacevic (De Paula, min. 50) y Nihat (Lee, min. 82).
BARCELONA 3: Valdés; Gabri, Pujol, Cocu, Van Bronckhorst; Motta, Xabi, Quaresma (Luis Enrique, min. 72), Luis García (Overmars, min. 65); Ronaldinho y Saviola (Kluivert, min 65).
GOLES: 0-1, min. 33: Motta. 1-1, min. 58: Jauregi. 2-1, min. 60: De Pedro, de penalti. 2-2, min. 71: Overmars. 3-2, min. 75: Karpin.
3-3, Min. 80: Gabri.
ARBITRO: Medina Cantalejo (Murcia). Expulsó a Motta en el minuto 73 por protestar la primera tarjeta.
Espectacular partido entre la Real Sociedad y el Bar§a en Anoeta, con seis goles que pudieron ser muchos más y un homenaje al fútbol ofensivo, sin complejos, para un justo reparto de puntos que no sirve de mucho a ninguno.
La esperada presencia de Javier de Pedro tuvo de inicio sus efectos porque por su banda llegó el mayor peligro de un conjunto donostiarra que a punto estuvo de marcar en el minuto 2, cuando Darko Kovacevic erró un mano a mano ante Valdés de los que no acostumbra a desperdiciar.
El Barcelona se metió muy rápido en el encuentro después de este gran susto y Saviola repitió opción en similares circunstancias a las del delantero balcánico, pero nuevamente se impuso el portero y Westerveld despejó la inmejorable oportunidad.
Los donostiarras mantuvieron su presión durante el primer cuarto de hora, en el que Schürrer, como en cada partido, disfrutó de una meridiana ocasión para marcar y también, como es habitual, erró su cabezazo.
Ahí se les acabó el gas a los locales, a los que les cuesta encontrar el nivel y el poderío de la pasada temporada. El conjunto azulgrana tomó las riendas del partido y sometió a la Real a un asedio constante en su área.
Los aficionados realistas, que habían intentado llevar a la Real en volandas, empezaron a ver las cosas más negras ante el acoso de un Barcelona que obtendría rédito a su presión en el minuto 33, con un excepcional cabezazo de Motta (0-1).
LA SEGUNDA, COMO LA PRIMERA
La segunda mitad mantuvo los parámetros del primer tiempo pero en esta ocasión la Real encontró la fortuna para empatar primero, por medio de Jauregi a pase de De Pedro, y tomar ventaja en tres minutos frenéticos con el zurdo internacional nuevamente como protagonista, al marcar con su decisión habitual el penalti con el que Medina Cantalejo sancionó un agarrón a Schürrer.
Frank Rijkaard tenía, no obstante, una bala en su recámara y la utilizó con la entrada en el campo de Overmars, quien en el primer balón que tocó realizó una espléndida acción individual y fusiló de duro disparo.
El partido seguía muy abierto, los dos equipos buscaban con ahínco tres puntos que pudieran relanzarle en la tabla y fue la Real, a falta de un cuarto de hora para el final del partido, la que volvió a tomar la iniciativa con un remate de Karpin tras un servicio por la izquierda de Aranzabal.
La estúpida expulsión de Motta parecía incapacitar al Bar§a. Pero los azulgranas tienen recursos y Gabri anotó un servicio de Ronaldinho.
