En un momento como el de un ascenso son muchas las muestras de alegría de afición, jugadores, entrenadores y miembros de la directiva, pero quizá una de las más importantes de anoche fue el abrazo entre el entrenador del Don Benito, Juan García, y el director deportivo, Patri. Las lágrimas de García eran visibles y comprensibles. El técnico pacense llegó a comienzos de temporada con el objetivo de devolver al Don Benito al play off y lo ha llevado a Segunda B por la vía rápida. «Es impresionante lo que hemos conseguido, el tres en uno, liguilla, campeonato y ascenso», declaraba aún emocionado tras el encuentro.
La euforia fue tremenda en Don Benito. Primero en un Vicente Sanz a rebosar, después den la Plaza de España, donde seguidores y jugadores celebraron hasta altas horas el ascenso.
El entrenador del Don Benito tuvo palabras de agradecimiento para todos los que les han apoyado durante la temporada. «La ciudad se ha volcado, se lo merecen, y todos los que trabajan aquí por el ascenso, porque yo sólo estoy aquí desde el día que me visteis llegar en verano y ha sido enorme como nos han tratado y el final que hemos tenido».
Juan García admitía que todavía sentía como se le salía el corazón del pecho pero que eso no le impedía disfrutar del momento. Hubiera preferido sufrir menos pero cree que su equipo hizo un gran trabajo. «Yo prefiero no sufrir, para nosotros es horrible, pero estoy muy contento, al final el fin justifica los medios». Aseguró que en momentos como ese se acuerda de los más queridos. «Están aquí cerca, están conmigo, los que me aguantan».
La felicidad de Gonzalo
Otro de los que más abrazo recibía anoche era el capitán, Gonzalo. El más veterano vistiendo la elástica rojiblanca ha disfrutado este ascenso de una manera especial. «Después de tantas liguillas y no poder ascender conseguir esto ahora no se pude explicar, una gran alegría», señalaba el capitán.
Cree que este ascenso se ha conseguido con «trabajo y entrega» y que conseguir quedar primero les ha dado muchas opciones de poder ascender. Además se acordó de felicitar a su rival por su entrega en esta eliminatoria. «Unionistas han estado a un gran nivel, nos han hecho correr mucho, yo ahora mismo necesito otras piernas».
Aseguró que se le venían a la cabeza muchos malos momentos que han podido ser superados y de antiguos compañeros y fases de ascenso no superadas. «Esto es durante todo un año, pasando frío y lluvia. Sólo el que está dentro del vestuario sabe lo que cuesta llegar a conseguir esto y estoy muy contento».
Más tranquilo se mostraba el goleador de la tarde, el hombre que ha dejado su nombre grabado en la historia del Don Benito, David Amorín. Agradeció a la afición el esfuerzo y el apoyo durante toda la temporada. «Se han desplazado muchos partidos para estar ahí, apoyándonos y será histórico», asegura el delantero canario quien cree que tiene mérito haber conseguido el ascenso ante un gran equipo y se quita mérito por el gol. «Podría haber marcado tanto yo como otro compañero, lo importante era ganar el partido y lo hemos conseguido, ellos son un buen equipo, tocan bien la pelota y juegan bien al fútbol, pero en casa, con nuestra afición es un plus». Además reveló a quien dedicó el gol con el gesto del saludo militar, al también futbolista canario del Extremadura Airam Cabrera.
