Al Díter Zafra han comenzado a sonreírle los marcadores. No está al alcance de cualquiera sellar con sendos triunfos dos salidas consecutivas. Los segedanos ganaban en Linares hace dos jornadas y en la última se traían tres puntos del complicado estadio del Cartagonova, uno de los favoritos. Pero a pesar del sustancial cambio de guión su entrenador, Angel Marcos, asegura estar tranquilo y es consciente de lo mucho que aún queda por hacer.

Bueno, ya llueve menos, ¿no? Su equipo ha salido de posiciones de descenso...

--Para eso estábamos trabajando y los dos últimos resultados son precisamente eso, un premio al trabajo. Es difícil ganar un partido en esta categoría y lo es más hacerlo a domicilio. Si encima lo consigues dos semanas y de forma consecutiva...

Y claro, se siente muy bien, ¿no es así?

--Por supuesto que estoy contento. Pero con los pies en el suelo y tan tranquilo como antes. Mira, estábamos trabajando bien y lo he dicho por activa y por pasiva. Sobre todo a los jugadores. Sólo nos faltaba que el trabajo diese sus frutos y los marcadores estuvieran en consonancia. Pero nada más. Lo único que ha cambiado es que hemos logrado ganar dos partidos y sumar seis puntos.

Pero es muy complicado mantener la moral, ¿no?

--Cuando miras atrás y te pones a pensar llegan las conclusiones. Creo que tocamos fondo el día del Moralo. Hicimos un buen partido pero perdimos 1-4. Y la afición nos respaldó. Aguantó hasta el final del encuentro y aplaudió a rabiar obligando a los jugadores a saludar desde el centro. Ahí estuvo la clave. Los jugadores sintieron el apoyo y yo les dije que la mala suerte no iba a estar siempre presente. Creímos en nosotros y logramos que cambiase la suerte.

¿Y el entrenador no llego a perder la fe?

--No, nunca. Los entrenadores tenemos que estar preparados para todo. El año pasado estuve toda la temporada arriba. Y este año me toca estar abajo. Pues muy bien. Lo que hay que tener claro es el objetivo e intentar cumplirlo con trabajo e ilusión.

¿Cuál es el objetivo inmediato ahora?

--Pienso que buscar el equilibrio y aferrarse a la regularidad, que es la que nos puede dar la permanencia. Ese es el reto del Díter y para eso vine yo, para intentar conseguirlo.

¿Se va a reforzar el equipo en diciembre?

--Se están viendo cosas y algunas pueden ser interesantes. Mira, el equipo tiene sus limitaciones y el domingo tuvo que jugar un delantero, Dieguito, de lateral y debutó un chaval de 15 años, Regino. Para el domingo seguimos con un montón de bajas. Hay que hacer algo y todo el mundo conoce ya nuestra realidad y los planes que hay para reforzar el equipo.

Y este fin de semana llega el Jerez en otro derbi...

--Y es un partido difícil porque el Jerez es un equipo difícil. Pero nosotros vamos a insistir en nuestro empeño.