Sonriente, atento e interesándose por todo lo se ponía delante de sus ojos. El domingo por la noche ´participó´ en la fiesta de celebración del ascenso del Cacereño (llegó a compararla con la de los Lakers) antes de visitar y "admirar" la ciudad monumental y ayer se dio un baño de masas con los 300 niños que participan en el campus de su amigo y compañero en los Toronto Raptors de la NBA, el extremeño José Manuel Calderón.

Chris Bosh, estrella en la NBA, se lo pasó en grande en Cáceres con los más pequeños en el IES Universidad Laboral. En EEUU tiene experiencias similares cada verano. No escatimó ni un solo autógrafo en un evento que impulsa "la excelencia del deporte extremeño", se afirma en el dossier que distribuye Marca Extremadura, organizadora del campus de baloncesto. Y disfrutará en Villanueva de la Serena, como anunció ayer. Quiere retener también la imagen de la localidad natal del base tras deshacerse en elogios sobre Cáceres.

Mañana volverá a EEUU y con ello habrá cumplido , asegura, con lo pactado: Calderón ya ha estado en su casa, con lo cual la devolución de la visita está servida.

COMPAÑERISMO "Lo más importante para los niños es aprender a trabajar en equipo y tener compañerismo", dijo en la comparecencia que compartió con Calde . Tanto el extremeño como el estadounidense se mostraron muy felices por el encuentro en la comunidad. El ala pívot llega acompañado de un hermano y una prima. "Esta zona de España tiene mucha historia, y esta ciudad, con su parte histórica, especialmente", vino a decir el jugador, habitual en las últimas temporadas en el All Star y que, incluso, podría cambiar de equipo este verano. Tranquilo, mostró su mejor cara en todo momento.

Bosh habló maravillas del base. "José es un gran jugador y un gran compañero". Mientras tanto, el villanovense volvió a reiterar, como cuando anunció la presencia de la megaestrella del baloncesto mundial en su campos, que no ha tenido que esforzarse especialmente por lograr su objetivo de que su compañero le ayude a conseguir el éxito del campus, que cumple este año su tercera edición.

"Tan solo le dije que estaría rodeado de niños. A él le gustan mucho", declaró Calderón a los periodistas. La sonrisa cómplice de su amigo denota un buen feelling entre ambos, una complicidad que también ha dado buenos réditos en la cancha.

TAMBIEN DOBLAS En el campus, además, participa David Doblas, jugador del Bruesa, y José María Panadero, exjugador del Cáceres que ejerce también de cicerone de Bosh. Por allí pasan estos días entrenadores extremeños como Ñete Bohigas o Mario Madejón.

"Este campus es diferente a los demás. Ninguno ofrece la posibilidad de de contar con una estrella como Chris, además de estas instalaciones. Es increíble que un jugador como él esté en Cáceres; los niños lo recordarán toda la vida". Así puede ser, aunque también por él: la principal imagen en el mundo de Marca Extremadura es requerida por los niños con frecuencia.

Es todo un ídolo el base, que también habló sobre su ausencia de la selección en el próximo compromiso oficial. Calderón asegura que su renuncia para jugar el Europeo es ya definitiva en esta ocasión. La lesión que padece es una rémora demasiado grande para él, y por ello ha decidido recuperarse totalmente de cara al futuro.