El Real Madrid disputa hoy su tercer partido amistoso de pretemporada en Asia, donde el estadio estará totalmente lleno. 40.000 espectadores han tenido la suerte de contar con una entrada. La más barata costaba 50 euros. En su momento, el público estuvo cuatro noches durmiendo en las taquillas para garantizarse un asiento. En Hong Kong, por cierto, se ha abierto la polémica al denunciarse que la Federación de Hong Kong se ha quedado con más entradas de las debidas.

La expectación es inusitada. La reventa funciona en Internet y fuentes del Real Madrid dijeron que se abrirán las puertas cinco horas antes del partido. Rodeado de rascacielos, en medio de la gran ciudad, el estadio es moderno, inaugurado en el año 94, muy abierto y con poca grada en los fondos. Las dos grandes tribunas laterales en forma de arco recuerdan al estadio de San Mamés.

En Hong Kong hay costumbres nuevas para los aficionados del fútbol español. Por ejemplo está prohibido fumar en todo el recinto. A pesar de estar al aire libre, el estadio es un sitio público y como tal se debe preservar a los no fumadores. La multa de la policía que vigila con celo esta falta es de 200 euros.

Queiroz seguirá haciendo pruebas. Saldrá un equipo potente. Rubén es baja. Solari y Morientes tendrán minutos. Munitis y Julio César aún no han jugado un minuto y lo tienen complicado. Munitis se está entrenando bien, pero su situación deportiva de transferible le deja sin opciones de debutar en Asia.

De los ensayos de pretemporada, llama la atención de ver a Celades de interior derecho. En situación de apuro hasta de lateral en ese costado. La selección de Hong Kong estará reforzada por seis futbolistas chinos: An Qi, Zhang Chung Wa, Li Ming, Wang Peng, Hao Hai Dong y Lee Yiu.

El partido se televisará a 23 países y según la Federación local las previsiones son de que este amistoso sea visto en 300 millones de hogares en todo el mundo.

ENTRENAMIENTO MOVIDO

Carlos Queiroz dirigió ayer un ensayo fuerte en medio de una condiciones climáticas adversas. Con 34 grados y una humedad de un 85 por ciento, el calor y la sensación de agobio es asfixiante. Los jugadores perdieron 2,5 kilos de peso. Sin embargo, a los 23.000 fanáticos del Real Madrid que acudieron les da igual la temperatura. Son en su mayoría jóvenes con edades que oscilan entre los 10 y los 18 años, y que desafían todo tipo de inconvenientes con tal de ver de cerca a sus ídolos.

En Hong Kong el reclamo es David Beckham. Existe un culto casi religioso hacia él. En China, Beckham compartía protagonismo con Raúl, mientras que en Japón, con Ronaldo, Raúl, Zidane y Figo.