Faltan 16 días para el Francia-Rumanía que inaugurará la Eurocopa de fútbol y el país anfitrión tiene ante sí el enorme reto de garantizar la seguridad de un acontecimiento deportivo en el que se esperan casi tres millones de espectadores en los diez estadios que acogerán los 51 partidos programados entre el 10 de junio y el 10 de julio.

Un mes en el que el dispositivo desvelado este miércoles por el ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, deberá hacer frente no solo a la amenaza terrorista sin precedentes que pesa sobre el Hexágono, sino a los ‘hooligans’ y a lasprotestas contra de la reforma laboral que desde hace más de dos meses sacan a la calle a miles de personas.

EL AVISO DE LA FINAL DE COPA

La seguridad está en el centro de las preocupaciones de las autoridades francesas, que deberán subsanar en tiempo récord las deficiencias detectadas el pasado sábado en el Estadio de Francia, durante la final de Copa entre el París Saint Germain y el Olympique de Marsella, que culminó con incidentes protagonizados por las dos aficiones.

"Nadie nos impedirá seguir celebrando los valores del deporte, y menos aún los terroristas", ha afirmado este miércoles el titular de Interior. En los 30 días que durará el torneo, más de90.000 policías, gendarmes y agentes de seguridad privados tendrán la misión de garantizar que todo transcurra con normalidad. A ellos se sumarán 10.000 militares, unos mil voluntarios y miembros de los servicios de protección civil.

AMENAZA TERRORISTA DIFUSA PERO REAL

Desde hace meses, los servicios secretos franceses criban todas las informaciones sin que, de momento, ni ellos ni sus colegas extranjeros hayan detectado objetivos concretos de un eventual acto terrorista durante la Eurocopa. Sin embargo, la amenaza es difusa pero real.

De ahí que haya selecciones que sean objeto de una especial vigilancia, bien por la implicación de sus respectivos países en la lucha contra el yihadismo, bien por el contexto internacional. Se trata de las de Rusia, Turquía, Francia,Inglaterra o Ucrania. Una célula de análisis de riesgos permanecerá activada día y noche durante todo el torneo.

"Nuestro objetivo es que la Eurocopa sea una gran manifestación festiva, pero tenemos que decir la verdad a los franceses. Cero por ciento de precaución es 100% de riesgo, pero 100% de precaución no es riesgo cero", ha admitido Cazeneuve en una entrevista en el diario ‘L’Equipe’.

EL PELIGRO DE LAS 'FAN ZONES'

Un motivo de especial preocupación se centra en las llamadas ‘fan zones’ donde se darán cita las aficiones de los equipos. Aunque hasta la fecha no se ha detectado ninguna amenaza específica, el ministerio podría revisar en todo momento las medidas y decidir anularlas.

De la misma forma, según señala Cazeneuve en el diario deportivo, no se excluye que puedan celebrarse encuentros a puerta cerrada si el pragmatismo lo exige. "No expondremos a nadie a ningún riesgo, pero tampoco vamos a generar angustia", ha destacado.

Igualmente, ha dejado la puerta abierta a prohibir las manifestaciones si las fuerzas del orden no están en condiciones de garantizar la seguridad de las mismas. Por lo que respecta a los riesgos que pueden entrañar los 'hooligans', Francia trabaja con los servicios policiales de los diferentes países de origen para poder detectarlos una vez que lleguen a territorio francés.