El ciclismo español dijo ayer adiós, por segunda vez en un mes, a uno de sus dos equipos en la élite. Euskaltel confirmó que se han roto las negociaciones con Fernando Alonso, que estaba dispuesto a comprar la licencia del conjunto vasco y que contaba con un patrocinador para seguir en el pelotón. No le convencen ni las cuentas del equipo ni las exigencias que plantea respecto a heredar varios contratos, algo que Euskaltel niega.

La empresa telefónica mostró ayer en un comunicado su "tristeza y decepción" por no haber podido finalizar con éxito las negociaciones con el piloto. "Al no lograrse un acuerdo, Euskaltel se ve obligada a retomar, lamentablemente, el proceso de cierre ordenado y responsable del proyecto". Ese cierre, provocado por la falta de un segundo patrocinador tras el cese de las ayudas públicas, ya se anunció en agosto.