José Manuel Calderón, que estos días continúa deshojando la margarita sobre su futuro, es el máximo exponente del baloncesto extremeño, quien más lejos ha llegado (14 años en la NBA). Pero tras el hay muchas jóvenes promesas y técnicos ya consolidados, además de la árbitra Esperanza Mendoza, que dejan claro la buena salud de la que goza el basket regional. Y este verano es especialmente notorio, ya que nunca antes había tenido tantos representantes en las diferentes seleccionales nacionales. Cuatro jugadores, dos entrenadores y dos preparadores físicos han recibido la llamada de la Federación Española de Baloncesto (FEB).

«Siempre hemos tenido algo, pero no es normal tanta presencia», se congratula Jorge Santos, secretario general de la Federación Extremeña. «Esto es fruto del trabajo», añade, destacando la importancia no solo por la participación inmediata de los seleccionados, sino por la repercusión futura. «Esto va a facilitar que la gente vea que se hace en baloncesto y que las opciones son muchas, es muy positivo, es un trampolín para que muchos otros jóvenes se acerquen al basket».

Entre los jugadores seleccionados destacan Mamen Blanco (selección sub-19) y Alejandro Galán (sub-20). Ambos juegan ya fuera de la región, «pero tanto uno como otro han estado hasta cadetes en Extremadura, jugando con las diferentes selecciones», cuenta Santos, que ya no los ve como una promesa, sino como jugadores casi consolidados. Ambos juegan hoy. Ella, placentina, en el Campeonato del Mundo; él, de Calamonte, en el Eurobasket en busca de la final.

Promesas, pero con mucho futuro, son los jóvenes, Javier Pinilla (EDV Guadalupe) y Marta Del Río (CP Miralvalle), que van a participar en el programa Operación Talento de la FEB. Para él será la primera vez, pera ella la segunda.

Además de jugadores, Extremadura también aporta técnicos. Un clásico es Jacinto Carbajal y nuevo este año ha sido Jesús Sánchez. Además, dos preparadores físicos, Javier Gómez y María Reina, ayudarán en la Operación Talento. Y no hay que olvidar a la árbitra, la única en la élite, Esperanza Mendoza.