El Extremadura Cáceres 2016 dio ayer el pistoletazo de salida a la pretemporada del nuevo equipo que este año entrenará el técnico Nano Maroño. El conjunto cacereño --que ya no llevará el apellido de Forma debido al abandono del patrocinio por parte de la empresa por la crisis del sector de la construcción-- realizó una sesión marcada por las nuevas incorporaciones.

Maroño se presentó oficialmente ante una plantilla en la que, según declaró, "va a haber espacio para dar oportunidades a los jugadores jóvenes de aquí, de jugar en una categoría tan importante como es la División de Plata" y se mostró totalmente de acuerdo con la línea ideológica expresada por la junta directiva que quiere utilizar a la cantera como revulsivo contra la crisis. Y es que la entidad que preside Fermín Naranjo ha tenido que prescindir de varios de sus mejores hombres debido a los recortes de presupuesto surgidos de la pérdida de su principal patrocinador.

El técnico gallego sometió a los suyos a un primer entrenamiento suave, en el que los deportistas hicieron ejercicios de abdominales seguidos de carrera continua. No obstante, avisa: "me gusta trabajar duro, sobre todo a estas alturas", y añadió que el "mayor problema" que le puede surgir al principio es "si ellos van a ser capaces de adaptarse a la intensidad del trabajo", aunque confía en la juventud del cuadro para que los jugadores adquieran la forma física ideal antes del partido del día 12 de septiembre en Lanzarote.